Reyes Isven
Xalapa, Veracruz, México 1987. Estudió Lengua y Literatura Hispánicas en la Universidad Veracruzana. Ha publicado en las revistas Punto de partida y Trifulca. Es autor de los poemarios Vendrá un día (Eme ediciones, 2011) y Una casa, un día (inédito). En 2009 fue seleccionado para participar en el primer curso de creación literaria para jóvenes convocado por la Fundación para las Letras Mexicanas y la Universidad Veracruzana; en 2010 asistió al taller poético impartido por José Luis Rivas en Xalapa. Fue beneficiario del Programa de Estímulo a la Creación y al Desarrollo Artístico de Veracruz en
la categoría de jóvenes creadores durante 2011.
Una casa un día
Toda la madera de los árboles para una casa un día:
algo que se parte algo que se hace para siempre
La seguridad de los árboles
Construyamos una casa aquí
enterremos árboles en el jardín
pensemos además del nuestro
en el futuro de los árboles
y la naturaleza sus frutos
creciendo junto a nosotros
y pensemos también
en nuestros frutos
que aunque ácidos
dulces o amargos
serán finalmente nuestros.
Preocupaciones sobre la casa donde vivimos
se deteriora la casa
y así vivimos
quiero decir, un poco preocupados por estas paredes
que no se caerán pero que ya no son blancas
Se deteriora la casa
pero limpio cuando vienes
limpio hasta donde puedo
y me baño
también me baño
y riego las plantas
quiero decir, la de mis pies
para que vengas.
Los caminos desaparecen en primavera
Olvida la casa la pista de hielo olvida olvidalo todo
los amigos que no fueron que se quedaron deshaciendo mariposas en sus estómagos
hurgándose los ombligos que se quedaron que no dijeron nada no dijeron:
no vamos no nos gusta el mar ni las pistas de hielo ni nos gusta tu casa
y la playa se erosiona el mar se erosiona olvidalo todo la casa se está metiendo al mar
el mar todo las gaviotas los caminos desaparecen en primavera
¿sabremos a caso llegar?
Fuera de mi cabeza perra
Muerto al fondo
de la memoria
el día
el año
que conocimos un día
como si otoño
una piedra
una madera
preciosa
piedra
piedra
hubiera querido ser
y Dios
de agua
para que lloraras
entonces de mí
perra.
Apuntes
Tomamos una carta al azar
y apuntamos los límites de un barco
frágil como los primeros versos
-Arquimedes dijo que si flota
es por la poesía.
//////////////////////////
Un techo de dos aguas
la construcción elemental
para comenzar la vida.
El renacimiento
vendrá un día un día vendrá un día
Edgar Bayley
I
Un día todo se abandona
Desalojan los amores miserables
las palmas de las manos duras
Lo que hago mal se pudre para siempre siempre mal
y siempre es mucho tiempo
para un muchacho confundido del ahora después será.
II
Trazan próximos futuros los muchachos
Permanecer tranquilos es una cuestión de principios
alguien tiene que encender el mundo.
Para la vida estar vivos
A mis amigos, lo de siempre.
Todoalgo (nada)
nace en los interminables
sembradíos de cebollas
que se abren de los días
sin una perla de consuelo
con polvo se hacen versos insdestructibles.
Piedra & puente
Piedra piedra
pasto puente
tuve un día
tanto sueño
y temí
el fondo
del cansancio
un recuerdo
insistente
el karma
el calor
la juventud
polvo a la distancia
agria juventud
karma caluroso
agria juventud
piedra puente
Fuera de mi cabeza perra
Muerto al fondo
de la memoria
el día y el año
que conocimos un día
como si otoño
una piedra
una madera preciosa
piedra piedra
hubiera querido ser
y Dios
de agua
para que lloraras
entonces de mí perra
Los días y los árboles
Tenso oficio de años
de ramas
que no nacen
y no alcanzan
sus puntas aromadas
vislumbrar
el placer de la paciencia
de una mesa terminada
se parece tanto
a este momento
para llegar a un sitio cómodo
libre y tenso
sobre una mesa
de árbol joven
.