Momoko Kuroda
Momoko Kuroda 黒 Kuroda Momoko. Nació el 10 de agosto 1938 es una poeta japonesa haiku y ensayista.
Nacida en Tokio, Japón, se trasladó a la edad de seis años con su familia a la Prefectura de Tochigi huyendo de la guerra y de los B-29 en el bombardeo aéreo de Tokio. Pasó el resto de su infancia en el campo de Tochigi, regresando a Tokio cuando entró en la Universidad Cristiana de Tokio Mujer, con especialización en psicología. Después de su graduación, fue contratada por Hakuhodo, una empresa de publicidad donde trabajó hasta su jubilación a los 60 años, llegando a un cargo de gestión.
Colecciones Haiku
Ki no Isu. Bokuyōsha de 1981
Mizu no Tobira. Bokuyōsha, 1983
Ichiboku Isso. Kashinsha, 1995
Kaká Sojo. Kadokawa Shoten, 2005
Nikkō Gekko. Kadokawa, 2010
Ginga Sanga. Kadokawa, 2013
Otras obras
Anata no haiku zukuri Kigo sin Kurashi aru. Shogakukan, 1986
Kyo kara hajimeru haiku. Shogakukan, 1992
Haiku, Hajimete mimasenka. Rippū Shobō, 1997
Kuroda momoko saijiki. Rippū Shobō, 1997
Haiku de la DEA u. Shogakukan, 1997
Hajimete ningún haiku zukuri 5-7-5 sin tanoshim i. Shogakukan, 1997
Hiroshige Edo Meisho Ginko. Shogakukan, 1997
"Oku no hosomichi" o Yuku. Shogakukan, 1997 (con fotografía de Ueda Shōji)
Katengecchi. Rippū Shobō, 2,001
Shōgen: Shōwa ningún haiku. Dos volúmenes. Kadokawa, 2,002
Kigo sin kioku. Hakusuisha, 2003
Nuno no saijiki. Hakusuisha, 2003
Henro Shikoku Ginko. Chūō Koron Shinsha, 2003
Yōjōkun Kaneko Tota. Hakusuisha, 2,005
Haiku Retto nihon sumizumi gin'yū. Iizuka Shoten, 2005
Haiku sin Tamatebako. Iizuka Shoten, 2008
Kurashi sin saijiki. Iwanami Shoten, 2011
Saijiki Tegami. Hakusuisha, 2013
Kataru Tota jinsei haiku waga. Iwanami Shoten, 2014
Premios
1975 Natsukusa Premio Nuevo Poeta
1 982 premio a la Mejor Mujer Moderna Haiku Poeta de Ki no Isu
Premio 1.982 quinta Asociación Haiku Poetas Mejor Nuevo Talento para Ki no Isu
1986 Premio Natsukusa
1995 premio de la Asociación Poetas Haiku para Ichiboku Isso
2008 premio primero Katsura Nobuko
2011 Premio Dakotsu 45a para Nikkō Gekko
El bambú joven
al crecer llama
a quienes ya no están
Momoko Kuroda, I wait for the moon.
Momoko Kuroda, haikus de Fukushima
Publicado por Martín López-Vega
Momoko KurodaCuando el 11 de marzo de 2011 el mayor terremoto de la historia de Japón produjo además un tsunami que sumergió las aldeas del norte y se llevó consigo de vuelta al mar cuanto y a cuantos encontró a su paso, El Cultural nos pidió a algunos poetas o similares (lo de similares va por mí) que escribiéramos unos haikus de urgencia.
Ahora, más de cuatro años después, cuando siguen llegando las noticias preocupantes de la central de Fukushima, han caído en mis manos los haikus que escribió entonces la poeta Momoko Kuroda (n. 1938), una de las autoras de haikus más prestigiosas de su país, ganadora del premio Dakotsu, el más prestigioso de entre los que distinguen a los practicantes del género chico (con perdón). Se han editado en inglés, junto con otros de su autora, bajo el título I wait for the moon, en edición de Abigail Friedman, que no sólo traduce los poemas sino que añade sustanciosos y esclarecedores comentarios.
El primer haiku que escribió entonces Momoko Kuroda fue este:
Desde lo más profundo del mar
a lo más profundo de su sueño
caen los pétalos del cerezo
El siguiente haiku tiene que ver con el desplazamiento de casi trescientas mil personas tras el desastre de Fukushima:
Viento salvaje del Este-
una anciana camina
hacia calles que desconoce
El haiku no desdeña la intertextualidad. Masaoka Shiki ya escribió un haiku tras un hecho similar, el terremoto del 15 de junio de 1896. Escribió Shiki:
Lluvia de mayo.
Cada gota es
la lágrima de alguien.
Y dice el de Momoko:
Terrible tsunami
ya lo dijo Shiki
primavera de lamentos
La contemplación de la naturaleza también se tiñe del recuerdo de los muertos en estos haikus:
El bambú joven
al crecer llama
a quienes ya no están
Y en algunos de ellos llega a identificar a quienes se fueron con esa naturaleza:
Gentes de Michinoku
pétalos que caen
uno a uno
Algunos nos recuerdan a los epigramas occidentales:
Pasa la primavera
los niños y las niñas de Michinoku
pasan también