Quantcast
Channel: POETAS SIGLO XXI - ANTOLOGIA MUNDIAL + 20.000 POETAS: Editor: Fernando Sabido Sánchez #Poesía
Viewing all 7276 articles
Browse latest View live

VIOLETA PARRA [9122]

$
0
0


Violeta Parra
Violeta del Carmen Parra Sandoval (San Fabián de Alico o en San Carlos, 4 de octubre de 1917 - Santiago de Chile, 5 de febrero de 1967) fue una cantautora, pintora, escultora, bordadora y ceramista chilena, considerada por algunos la folclorista más importante de Chile y fundadora de la música popular chilena. Era miembro de la prolífica familia Parra.
El aporte de Violeta Parra al quehacer musical y artístico chileno se considera de gran valor y trascendencia. Su trabajo sirvió de inspiración a muchos artistas posteriores, que continuaron con su ardua tarea de rescate de la música del campo chileno y las manifestaciones constituyentes del folclore del país y de Latinoamérica. Sus canciones han sido versionadas por gran cantidad de artistas nacionales y extranjeros.

Hija del profesor de música Nicanor Parra Parra y la campesina Clarisa Sandoval Navarrete, Violeta tuvo cinco hermanos y dos medio hermanos.
Existe controversia sobre su lugar de nacimiento, probablemente basada en que San Fabián pertenecía antiguamente al Departamento de San Carlos y en general a que las subdivisiones políticas y administrativas de los lugares geográficos en la zona han sufrido repetidos cambios. La Municipalidad de San Carlos afirma —en su sitio oficial y un cartel a la entrada de la ciudad— ser «la cuna de Violeta Parra» y la casa ubicada en la calle El Roble N°535-531 fue declarada monumento histórico en 1992 porque supuestamente allí nació la cantante. La familia de Violeta Parra, en cambio, no ratifica este dato y en el sitio de la Fundación Violeta Parra se afirma que la folclorista nació en San Fabián de Alico, localidad ubicada al interior de San Carlos.
La infancia de Violeta transcurrió en el campo, aunque de 1919 a 1921 la familia residió en Santiago, para regresar ese año al sur, a Lautaro; después se trasladó a Chillán y finalmente se instaló en Villa Alegre.
Su madre se afanaba sobre la máquina de coser para cooperar a la mantención de la numerosa familia. Violeta sufría continuamente de enfermedades, incluyendo un ataque de viruela a los tres años. Mientras mejoraba, se divertía junto a sus hermanos en las aguas del vecino río Ñuble y en los aserraderos y barracas del sector.
Los niños revelaron precozmente su inclinación al espectáculo. Imitaban a los artistas de los circos que se instalaban en las proximidades del hogar. Se disfrazaban con atuendos de papel; Violeta y su hermano Lalo, cantaban a dúo y montaron varias representaciones por las que cobraban entradas a los niños. Violeta empezó a tocar la guitarra a los 9 años, mientras que a los 12 compuso sus primeras canciones.
Realizó los cursos primarios y estuvo un año en la escuela normal, que abandonó para trabajar en el campo y ayudar a su familia, ya que su padre enfermó gravemente. Los hijos de la familia lucharon por sobrevivir saliendo a cantar en restaurantes, posadas, circos, trenes, campos, pueblos, calles e incluso en burdeles.

Llegada a Santiago

Los problemas económicos se agravaron cuando el padre falleció en 1931 y, al año siguiente, Violeta se fue a vivir a Santiago invitada por su hermano Nicanor, que estudiaba allí. Retomó los estudios en la Escuela Normal de Niñas, donde no se sintió a gusto, porque era el canto y no la escuela lo que le interesaba. Por eso, la dejó y comenzó a cantar en bares, quintas de recreo y pequeñas salas de barrio junto con su hermana Hilda, en un dúo de música folclórica llamado Las Hermanas Parra, con lo que tenía una fuente de ingresos.
En 1935, su madre y sus hermanos llegaron a Santiago y se instalaron en la comuna de Quinta Normal. Tres años más tarde se casó con el empleado ferroviario Luis Cereceda, con el que tuvo dos hijos: Ángel e Isabel. Ambos se convirtirían en importantes músicos y adoptarían el apellido materno al ingresar en el ambiente artístico. El matrimonio —que vivió en Llay-Llay, Valparaíso y Santiago—, no tardó en presentar inconvenientes, dado el carácter inquieto y lleno de distracciones de Violeta —cantaba en botes del puerto, se presentaba en radios y se había unido a un grupo de teatro—, que no se acomodaban al ideal convencional de esposa. Se separaron en 1948, pero antes, Cereceda, que milita en el Partido Comunista, iniciaba a Violeta en la actividad política y ambos participan ayudando en la campaña presidencial de Gabriel González Videla (1946).
En 1949 nace su hija Carmen Luisa Arce Parra y ese ese mismo año contrae matrimonio con el padre de la niña, Luis Arce. En 1952 nace su hija Rosita Clara. En la misma época, editó sus primeros discos junto con su hermana Hilda, para el sello RCA Victor. Se trataba de grabaciones en formato single de canciones populares chilenas, como El Caleuche, La cueca del payaso y La viudita. El dúo funcionó de manera constante hasta 1953.
A principios de la década de los 50, comenzó su extensa labor de recopilación de tradiciones musicales en diversos barrios de Santiago y por todo el país. En estas andanzas, conoció a diversos poetas, incluyendo a Pablo Neruda y Pablo de Rokha. Su hermano Nicanor la estimuló a asumir con personalidad propia la defensa de la auténtica música chilena, en contra de los estereotipos que hasta ese momento se manejaban. Es así como su repertorio, hasta entonces basado en valses peruanos, corridos mexicanos, boleros y cantos españoles, pasa a las canciones más tradicionales del campo chileno, que le permiten descubrir los valores de la identidad nacional como ningún otro artista lo había hecho antes.
Esta labor de recopilación está plasmada en más de tres mil canciones, reunidas en un libro (Cantos folclóricos chilenos) y sus primeros discos en solitario, editados por EMI Odeon.

Los primeros viajes

En 1953 grabó los exitosos sencillos Casamiento de negros y Qué pena siente el alma, que se convirtieron en dos de sus canciones más conocidas. Al año siguiente (1954), mantuvo en la Radio Chilena el programa Canta Violeta Parra, y ganó el Premio Caupolicán a la folclorista del año, lo que le valió una invitación para presentarse en un festival juvenil en Varsovia, Polonia. Aprovechó este viaje para recorrer la Unión Soviética y partes de Europa. Fue particularmente provechosa su estancia en París, ya que allí grabó sus primeros larga duración (Guitare et chant: chants et danses du Chili, editado en 1956, y una serie de canciones grabadas que se editarían en diversas compilaciones posteriormente), que incluían exclusivamente canciones recopiladas del folclore chileno. El éxito obtenido en Europa era inédito para cualquier artista chileno, y Violeta se llenó de inspiración y creatividad. Fue en París que se enteró de la muerte de su hija Rosita Clara.
En 1957 regresó a Chile y en noviembre se va con sus hijos Carmen Luisa y Ángel a Concepción, contratada por la universidad penquista. Allí funda, al año siguiente, el Museo Nacional del Arte Folklórico y posteriormente regresa a Santiago.
Cuatro discos suyos aparecieron en ese período (Canto y guitarra, 1957; Acompañada de guitarra, La tonada y La cueca, todos de 1958), en la etiqueta de EMI Odeon, con varias de sus primeras composiciones. Acá asomaba la cantante preocupada de temas sociales (Yo canto a la diferencia), la brillante constructora de décimas y composiciones poéticas (Verso por desengaño) y la musicalizadora de poemas (Cueca larga de los Meneses, de su hermano Nicanor). Los discos se grabaron con el mínimo acompañamiento de una guitarra de madera, y en la actualidad se encuentran descontinuados, al igual que su álbum editado en Argentina (donde se censuró su polémica canción social Por qué los pobres no tienen") y el álbum Toda Violeta Parra, lanzado en 1960.
Además, su actividad artística se diversificó: trabajó en cerámicas, pinturas al óleo y arpilleras. Trabajó un tiempo en un museo de arte popular y folclórico que ella misma fomentó a crear en la Universidad de Concepción y luego viajó por casi todo Chile, ofreciendo cursos de folclore y recitales.

Una chilena en París

En 1961 Violeta se fue a Argentina, donde vivió en General Pico y Buenos Aires y en junio se reúne en esta última ciudad con sus hijos Ángel e Isabel y su nieta Tita para embarcarse rumbo a Finlandia para participar en el VIII Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes de Helsinki. Después, recorre la Unión Soviética, Alemania, Italia y Francia, donde se instala en París. Allí cantará en el Barrio Latino y dará recitales en Teatro de las Naciones de la Unesco, actuará en radio y televisión junto a sus hijos, bordará arpilleres y hará esculturas en alambre.
Además de lanzar al mundo del disco a sus hijos Ángel e Isabel, con el mote de Los Parra de Chile, continúa sus grabaciones con el LP Recordando a Chile (también conocido como Una chilena en París), que incluye dos canciones compuestas y cantadas en francés, así como también otros temas muy importantes de su carrera, como Paloma ausente y Arriba quemando el sol; grabó, asimismo, una serie de canciones para el sello Arión, en 1962, que surgirían en diversas recopilaciones con posterioridad. Es una etapa de gran nostalgia, tal como lo atestiguan canciones tan sentidas como Violeta ausente.
En 1964, la chilena logró una marca histórica al convertirse en la primera latinoamericana en exponer individualmente en el museo del Louvre. Escribió también un libro (Poesía popular de Los Andes) y la televisión de Suiza filmó un documental sobre su trabajo (Violeta Parra, bordadora chilena), que se constituyó en una de las escasas fuentes audiovisuales que hoy se conservan de la artista.
En este período forjó una firme relación junto al musicólogo y antropólogo suizo Gilbert Favre, el gran amor de su vida —con el que vivió en Ginebra, compartiendo su tiempo entre Francia y Suiza—, y destinatario de sus más importantes composiciones de amor y desamor (Corazón maldito, El gavilán, gavilán, Qué he sacado con quererte, entre muchas otras).
Sus textos más combativos surgieron en esta época: canciones como Miren cómo sonríen, Qué dirá el Santo Padre, Arauco tiene una pena y Según el favor del viento formarían la base de la corriente musical conocida como la Nueva Canción Chilena. Las canciones serían recogidas en las numerosas ediciones de Canciones reencontradas en París.

El final

En junio de 1965 Violeta regresó a Chile. A fines de ese año, instaló una gran carpa en la comuna de La Reina, con el plan de convertirla en un importante centro de cultura folclórica, junto con sus hijos Ángel e Isabel, y los folcloristas Patricio Manns, Rolando Alarcón y Víctor Jara, entre otros. A pesar de su bello sueño de convertir la carpa en un referente para la cultura de Chile, la respuesta no fue muy motivadora, y el público no la apoyó.
La indiferencia del público chileno fue uno de los factores que desencadenó su muerte. El final de su relación con Gilbert Favre, que se marchó a Bolivia en 1966 (originando una de sus canciones más conocidas, Run Run se fue pa'l norte) la dejó en un estado de ánimo muy vulnerable, lo fue a ver a Bolivia y lo encontró casado. Un mito urbano atribuyó la depresión de Violeta a un amor no correspondido por el cantante Pedro Messone, algo que este ha desmentido haciendo notar la gran diferencia de edades de ambos; que hubo una relación entre ambos lo habría dicho públicamente la misma cantautora, al declarar en una radio que había tenido un "hermoso idilio con él durante una gira al sur"; por lo demás, habría sido el uruguayo Alberto Zapicán y no Messone su última pasión.
Las últimas composiciones, disco lanzado ese mismo año y grabado junto a sus hijos y al músico Alberto Zapicán, incluye sus himnos humanitarios "Gracias a la vida" y Volver a los 17, además de otras canciones importantes y conocidas, como El rin del angelito, Pupila de águila, Cantores que reflexionan y El Albertío. Gracias a la vida ha sido interpretada por grandes artistas como Mercedes Sosa, Raphael y Pedro Vargas (en 1977 las autoridades de TVN prohibieron su triunfo en el programa La canción de todos los tiempos, en el que la interpretó Gloria Simonetti) y Volver a los 17 por Joan Manuel Serrat Milton Nascimento, Franco Simone y muchos otros.
El 5 de febrero de 1967, a los 49 años de vida, y tras varios intentos fallidos, Violeta Parra se suicidó en la carpa de La Reina, dejando un legado de esfuerzo y sacrificio a Chile y el mundo. Mientras para muchos resulta paradójico que la autora de ese himno a la que es Gracias a la vida terminara suicidándose sólo un año después de escribirla, otros críticos de su obra[cita requerida] ven en la letra, en el estilo de musicalización, los tonos usados y la monotonía de sus temas el reflejo de un estado de ánimo depresivo y una canción de despedida.

Legado musical

Violeta Parra dejó una gran cantidad de música inédita, que se ha ido conociendo después de su muerte. Sus Décimas autobiográficas (ya editadas en libro), que habían sido grabadas con voz de Violeta, fueron recopiladas en un Long Play editado por Alerce en 1976 (después ampliadas en Décimas y centésimas); Warner Music Chile sacó en 1999 el concierto que dio en Ginebra (Violeta Parra en Ginebra) y sus peculiares Composiciones para guitarra.
Además del gran legado de sus propias grabaciones, Violeta Parra ha sido versionada por una innumerable cantidad de músicos chilenos, entre los que se cuentan Víctor Jara, Quilapayún, Illapu, Patricio Manns, Los Jaivas, Inti Illimani, (que, además de diversas grabaciones individuales de canciones de Violeta, ejecutó la obra de Luis Advis Canto para una semilla, musicalización de las Décimas autobiográficas). Un tributo rock producido por Álvaro Henríquez con la participación de artistas como Los Bunkers, Pettinellis, Lucybell, Javiera Parra (su nieta), Chancho en Piedra y Juanita Parra (baterista de Los Jaivas) que vio la luz en 2001 con el título de Después de vivir un siglo. Incluso baladistas populares como Myriam Hernández, Gloria Simonetti y Luis Jara han incorporado la música de Violeta en sus repertorios.
Un aporte importante a la música es el rescate de la tradición musical chilena por parte de Violeta: el canto a lo divino (El rin del angelito, Verso por una niña muerta, por ejemplo), el lamento mapuche, sus canciones nortinas, sin dejar de lado su gran sensibilidad social en canciones como: Mazúrquica modérnica, Rodríguez y Recabarren, La carta, etc.
Cabe destacar en el legado musical de Violeta sus interesantes composiciones instrumentales para guitarra, donde conjuga folclorismo y modernidad.




"Si escribo esta poesía
no es sólo por darme el gusto
más bien para darle un susto
al mal con alevosía"



D É C I M A S

Autobiografía en verso
(fragmento)


Pa' cantar de un improviso
se requiere buen talento,
memoria y entendimiento,
fuerza de gallo castizo.
Cual vendaval de granizos
han de florear los vocablos,
se ha de asombrar hast'el diablo
con muchas bellas razones,
como en las conversaciones
entre San Peiro y San Paulo.

Tamién, señores oyentes,
se necesita estrumento,
muchísimos elementos
y compañero 'locuente;
ha de ser güen contendiente,
conoce'or de l'historia;
quisiera tener memoria
pa'entablar un desafío,
pero no me da el sentí'o
pa' finalizar con gloria.

Al hablar del estrumento
diríjome al guitarrón,
con su alambre y su bordón
su sonoro es un portento.
Cinc' ordenanzas le cuento
tres de a cinco, dos de a tres,
del clavijero a sus pies
l'entrasta'ura 'legante,
cuatro diablitos cantantes
debe su caja tener.

Y pa' cantar a porfía
habrá que ser toca'ora,
arrogante la cantora
para seguir melodía,
galantizar alegría
mientras dure'l contrapunto,
formar un bello conjunto
responder con gran destreza.
Yo veo que mi cabeza
no es capaz par' este asunto.

Por fin, señores amables,
que me prestáis atención,
me habéis hallado razón
de hacerle quite a este sable;
mas no quiero que s'entable
contra mí algún comentario,
pa' cominillo en los diarios
sobran muchos condimentos.
No ha de faltarm' el momento
que aprenda la del canario.





Muda, triste y pensativa
ayer me dejó mi hermano
cuando me habló de un fulano
muy famoso en poesía.
Fue grande sorpresa mía
cuando me dijo: Violeta,
ya que conocís la treta
de la vers'á popular,
princípiame a relatar
tus penurias "a lo pueta".

Válgame Dios, Nicanor,
si tengo tanto trabajo,
que ando de arriba p'abajo
desentierrando folklor.
No sabís cuánto dolor,
miseria y padecimiento
me dan los versos qu'encuentro;
muy pobre está mi bolsillo
y tengo cuatro chiquillos
a quienes darl' el sustento.

En ratitos que me quedan
entre campo y grabación,
agarro mi guitarrón,
o bien, mi cogot'e yegua;
con ellos me siento en tregua
pa' reposarme los nervios,
ya que este mundo soberbio
me ha destinado este oficio;
y malhaya el beneficio,
como lo dice el proverbio.

Igual que jardín de flores
se ven los campos sembra'os,
de versos tan delica'os
que son perfeutos primores;
ellos cantan los dolores,
llenos de fe y esperanzas;
algotros piden mudanzas
de nuestros amargos males;
fatal entre los fatales
voy siguiendo estas andanzas.

Por fin, hermano sencillo,
que no comprendís mi caso;
no sabis que un solo lazo
lacea un solo novillo.
Pica'o tengo el colmillo
de andar como el avestruz,
sin conseguir una luz,
ni una sed de agua siquiera.
Mientras tanto, la bandera
no dice ni chuz ni muz.





Pero, pensándolo bien,
y haciendo juicio a mi hermano,
tomé la pluma en la mano
y fui llenando el papel.
Luego vine a comprender
que la escritura da calma
a los tormentos del alma,
y en la mía que hay sobrantes;
hoy cantaré lo bastante
pa' dar el grito de alarma.

Empezaré del comienzo
sin perder ningún detalle,
espero que no me falle
lo que contarles yo pienso;
a lo mejor no convenzo
con mi pobr' inspiración
escas' ando de razón,
mi seso está 'polilla'o,
mi pensamiento nubla'o
con tanta preocupación.

Recularé algunos años
y de lugar mudaré,
así les resaltaré
sin "coilas" y sin engaños;
que se descarguen los daños
en la pobre relatora,
por no valerle hast'ahora
haberse amarra'o a Chile.
Si el canto no le da miles,
válgame Dios, la cantora.

Primero, pido licencia
pa' "transportar" la guitarra;
después, digo que fue Parra
quien me donó l'existencia.
Si me falta l'elocuencia
para tejer el relato,
me pongo a pensar un rato
afirmando el "tuntuneo",
a ver si así deletreo
con claridez mi relato.

Tenga calma la compaña
ya viene la despedí'a;
la poca sabiduría
mis ocurrencias empaña.
Siempre la suerte m'engaña
por mucha ilusión que tenga;
que la fuerza me sostenga
si el sacrificio es en vano,
y no me condene, hermano:
no hay mal que por bien no venga.





Aquí presento a mi abuelo,
señores, démen permiso,
él no era un ñato petizo,
muy pronto van a saberlo;
en esos tiempos del duelo
versa'o fue en lo de leyes,
hablaba lengua de reyes,
usó corbata de rosa,
batelera elegantosa
y en su mesa pejerreyes.

José Calixto su nombre,
fue bastante respeta'o,
amistoso y muy letra'o,
su talento les asombre;
más le aumente su renombre
al decir muy en breve,
no más entre marte' y jueves
procura mostrar su honor,
defendiendo el tricolor
el año setentainueve.

En la ciudad de Chillán
vivía en un caserón, 
dueño de una población
de gran popularidad.
Pa' mayor autoridad
manda sus hijo' a l'escuela,
y a petición de mi abuela
les enseña a solfear
par' un' orquesta formar
de arpa, violín y vihuela.

El día de San José,
nombre del dueño de casa,
s'hizo una fiesta grandaza
según lo supe después.
Había muerto una res,
llegan noventa visitas
con flores y tarjetitas,
besan y abrazan al santo,
lo avisan con harto canto,
valse, mazurca y cuadrilla.

Las damas con abanico,
de fraque los caballeros,
perfumosos y altaneros,
como son siempre los ricos,
saltaban como unos quicos
cuando bajaron del coche
y armaron tremendo boche
los chiquillos copuchentos,
hormigueando to'os mugrientos
entremedio 'e los fantoches.





Mi abuelo por parte 'e maire
era inquilino mayor,
capataz y cuidador
poco menos que del aire;
el rico con su donaire,
lo tenía de obliga'o
caballerizo monta'o,
de viñatero y rondín,
podador en el jardín
y hortalicero forza'o.

Todo esto, señores míos,
por un cuartito de tierra
y una galleta más perra
que llevaba a sus críos;
algunos reales, ¡Dios mío!,
pa´alimentar quince humanos,
sin mencionar los hermanos
que se apegaban al pial;
Don Ricardo Sandoval
cristiano entre los cristianos.

Al verlo a primera vista
parece mi lindo abuelo
algún arcángel del cielo
gemelo de Juan Bautista;
azules sus pupilitas,
dorada su cabellera,
montado en su yegua overa
no hay niña que no lo mire,
ni vieja que no suspire
por detrasito 'e mi abuela.

Cuenta mi madre afligida
que mi abuelito Ricardo,
era un hermoso leopardo
pa' batallar por la vida;
fuera de noche o de día
de aquí para allá galopa;
..............................*
en los inviernos terribles,
y en los veranos temibles
sudaba como as de copa.

Mi abuela a cargo 'e la casa,
amamantando sus críos,
llevando el agua del río
pa' preparar buena masa, 
criando pollos de raza,
sacando miel en enero,
limpiando trigo en febrero
para venderlo en abril;
y en mayo, ¡qué perejil
cosecha junto al estero!

* falta el original



Aquí tiene mi pañuelo

Aquí tiene mi pañuelo,
señora, seque su llanto,
no hay en el mundo quebranto
que no tenga su consuelo,
saque la vista del suelo
y míreme frente a frente,
que sufre toda la gente,
l'olvidaba por egoísmo,
eso conduce al abismo,
le digo primeramente.

No ha visto en los hospitales,
están sobrando las urnas,
porque las niñas nocturnas
se duermen como animales,
confunden los materiales
del moribundo paciente,
y al despertar de repente
jeringan a Juan Salgado
en vez de Juan Maldonado,
y echan a dos por el puente.

Hay diferencia en los bancos
por no sé cuántos trillones,
los ministerios mayores
también van diferenciando,
los funcionarios chupando
la teta ya mucho rato,
hay jefes que son retrato
del mismito Lucifer,
en esto sí que la ley
puede bramar garabatos.

Aquí le muestro un legajo
de sello, tinta y papel,
éste sí que es cascabel
que suena con desparpajo,
diez mil quinientos carajos
pueblan las casas legales,
y allí están los tal por cuales
en un sillón silloneado
y a fines de mes arreando
billetes muy especiales.

El rey de las oficinas
tramita qu'es un portento,
no deja por un momento
su puro y su gabardina,
teléfono y pluma fina,
ventana al Santa Lucía,
cocteles ord'en del día
y por la noche de frac,
p'al puestecito es un crac,
qué le parece mi amiga.

Engaño de punt'a cabo
en este mundo tan cruel,
engaño hast'en el plantel
d'estudios muy encumbra'os,
siete años amordaza'os
de pies y mano' arquitectos,
tratando bellos proyectos
de mil colores y formas,
cuando más tarde es la norma
de hacer cajones de muertos.





El médico en juramento

El médico en juramento
de servir l'humanidad,
con gran religiosidad
recibe un documento;
olvid'el primer momento,
le da por matrimoniarse,
en auto quiere pasearse,
ya no le incumb'el paciente,
si no es un rico pudiente;
el pobre vaya'enterrarse.

El abogado tan grave
delante de un garrapata
..................................*
s'encierra como con llave,
le dice que nada sabe,
le nombra otro consultorio;
en un blanco lavatorio
se lava como Pilato,
después de bailar un rato
la danza de los demonios.

Y eso es poco, en esta fiebre
miremos al comerciante,
con su sonrisa galante
los pasan gatos por liebres,
aunque los cielos se quiebren.
Hay que decir la verdad
de tanta calamidad
por la que estamos pasando;
váyase, pues, consolando
con tanta mariconá'.

Nadie se ha muerto de amor
ni por cariño fingido,
ni por vivir sin marido,
ni por supuesta traición;
el mundo es una estación
con trenes de sinsabores,
con faltas muy superiores;
su pleito no es una queja,
gran pleito es quien despelleja
sin lástima a nuestros pobres.

Señora, yo la condeno
a l'alto de una patagua,
cinco días a pan y agua
durante todas sus horas;
las lágrimas que me llora
no tienen explicación,
denuncie con su furor
la farsa politicante,
no los suspiros galantes
ni las razones de amor.

* falta en el original





Engaños en Concepción

Entré al clavel del amor
cegada por sus colores,
me ataron los resplandores
de tan preferida flor;
ufano de mi pasión
dejó sangrando una herida
que lloro muy conmovida
en el huerto del olvido,
clavel no ha correspondido,
qué lágrimas tan perdidas.

Fui dueña del clavel rojo,
creí en su correspondencia,
después me dio la sentencia:
no es grano sino gorgojo,
fue por cumplir un antojo,
me dice la flor del mal,
yo soy un hondo raudal
d´espumas muy apacibles
y el remolino temible
abajo empieza a girar.

Este clavel lisonjero
me causa tal confusión
que deja mi corazón
a mil grados bajo cero,
quisiera que un relojero
me acompasara el latido
y me componga el sentido,
que es tanta mi oscuridad
por una loca maldad
d´este clavel ofensivo.

Un lirio me da consejos,
me dice de qu´el clavel
en l´alma de la mujer
siempre ha rondado muy lejos,
mi sentimiento perplejo
se confundió de camino,
un pájaro con su trino
me dijo: parte de aquí,
y a mi Santiago volví
para cambiar mi destino.

Un año crucé las calles
gimiendo muy dolorosa,
y a trabajar afanosa
me fui por montes y valles,
no quieron entrar en detalles
ni remover las cenizas,
lo malo m´escandaliza,
quiebra nervios y huesos;
el viento voló sus besos,
la mar lavó sus caricias.

Publican de qu´el clavel
se fue a un jardín del Oriente,
yo fui leyendo sonriente
lo que decía el papel,
la vida es un carrusel
que va girando, girando,
ella me fue demostrando
que con el tiempo se cura
hasta la peor desventura
causada por un ingrato.




Con mi litigio de amor

Con mi litigio de amor
llegué donde el señor juez,
por remediar de una vez
la causa de mi aflicción;
le digo que en Concepción
sufrí muy grande amargura
que a punto de la locura
me tuvo el desasosiego
y al señor juez yo le ruego:
senténcieme con premura.

Mi caso tan complica'o
es éste, Su Señoría,
se me perdió l'alegría
sin saber cómo ni cuándo,
aquí me ve usted llorando
con la mirada en el suelo,
la vida me da recelo,
m'espanta su indiferencia,
la mano de la inclemencia
me ha echa'o este nudo ciego.

Ya ve mi cara, señor,
más pálida que la muerte,
escuche cómo de fuerte
palpita mi corazón,
mi pobre caparazón
tirita como en invierno,
mis venas son un infierno
que arden con fuego mortal,
castígueme el tribunal
si acaso culpa yo tengo.

Es increíble y penoso
lo que yo estoy padeciendo,
que se me van escondiendo
las ansias de hallar reposo,
motivo muy doloroso
el sueño me ha prohibido,
la fuerza me ha consumido
y me ha atormentado el alma
p'a mí lo que llaman calma
es vocablo sin sentido.

Si el día se me hace largo,
la noche el doble, señor;
con amapolas en flor
consigo entrar en letargo;
mi cautiverio es amargo,
sus yerros aborrecibles,
que ya se me hace insufrible
la luna del alto cielo,
y la Virgen del Carmelo
no está p'a mí disponible.




Me fui por un senderito

Me fui por un senderito
sembrado por blancos yuyos
y en árboles en capullo,
cantaban los chincolitos, 
en el estero infinito
les contestaban las aguas;
la sombra de la patagua
me recibió con cariño,
las lágrimas, del corpiño
cayeron hasta mi enagua.

Detrás de las alamedas
reinaban los animales,
perfuman los cereales
las trémulas sementeras,
las hojas por vez postrera
me brindan una sonrisa,
y me refresca la brisa
con sus esponjas la frente,
respiro serenamente,
ya nada me martiriza.

Semana que mis rosales
estaban ya florecidos,
yo con mi malo sentido
vi sólo sus espinales
las nubes primaverales
parecen una pintura,
los campos con su verdura
me han descorrido el telon,
mis ojos bailan al son
del viento por la llanura.

Ya no me clava la estrella,
ya no me amarga la luna;
la vida es una fortuna
vistosa, próspera y bella;
sus lluvias y sus centellas
nos engalanan los aires
nos brinda como una maire
su aliento renovadero,
yo siento qu'el mundo entero
está de canto y baile.

Nunca he subido al tribuno
jamás hablé con el juez,
solita me confesé
en mis terribles apuros,
miré más allá del muro
que me apartaba de todo,
y veo en su claro modo
que cada ser en su abismo
habita con egoísmo
bebiendo su propio yodo.




A los dos años cumplidos

A los dos años cumplidos,
curada ya de mi mal,
tropiezo en un animal
de misteriosos aullidos.
Violeta, me has conmovido
los huesos hasta la médula
y hasta la última célula
que tejen mi cuerpo humano,
deja tomarte la mano
muy limpia tengo mi cédula.

Yo que ando por este mundo
más triste que un' alma en pena
me retumbaron las venas
de verlo tan iracundo,
después tan meditabundo
que pienso que no m'engaña,
pero esta maldit' araña
al mes de su juramento
me niega su sentimiento
dejando brillar sus mañas.

Cómo es posible, me digo,
que siendo yo tan pequeña
se me descarguen las peñas
y siempre me quede al frío;
qué tienes, amigo mío,
en contra de mi esqueleto,
entre sollozos lo reto
y le hago ver su mudanza,
le digo sin más tardanza:
no sabes lo qu'es respeto.

Empieza de nuevamente
mi corazón la batalla,
el hombre es una muralla
de piedras omnipotente;
¿por qué tu cuerpo consiente
los golpes de tal martillo?
Quien lo maneja es un pillo
criado en los callejones,
palabras de maricones
y sangre de vinagrillo.

Vergüenza tengo, lectorio,
delante de mis pecados
que no tendrán los malvados
vergüenza de su velorio,
no saben de qu'el demonio
está preparando el fuego
porque son tantos los pliegos
que justifican sus daños;
al horno como rebaño
s'está chupando los dedos.




GRACIAS A LA VIDA

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me dió dos luceros que, cuando los abro,
perfecto distingo lo negro del blanco,
y en el alto cielo su fondo estrellado,
y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado el oído, que en todo su ancho
graba noche y día; grillos y canarios.
martillos, turbinas, chubascos
y la voz tan tierna de mi enamorado.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado el sonido y ell abecedario,
con el las palabras que pienso y declaro:
madre, amigo, hermano y luz, alumbrando
la ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado la marcha de mis pies cansados;
con ellos anduve ciudades y charcos,
playas y desiertos, montañas y llanos,
y la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me dió el corazón, que agita su marco
cuando miro el fruto del cerebro humano,
cuando miro el bueno tan lejos del malo,
cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida, que me ha dado tanto.
Me ha dado la risa y me ha dado el llanto;
así yo distingo dicha de quebranto,
los dos materiales que forman mi canto
y el canto de ustedes, que es el mismo canto,
y el canto de todos, que es mi propio canto-

Gracias a la vida...





La jardinera

Para olvidarme de ti
Voy a cultivar la tierra,
En ella espero encontrar 
Remedio para mis penas.
Aquí plantaré el rosal
De las espinas más gruesas,
Tendré lista la corona
Para cuando en mí te mueras.

Para mi tristeza violeta azul,
Clavelina rosa pa´ mi pasión
Y para saber si me corresponde 
Deshojo un blanco manzanillón.
Si me quiere mucho, poquito, nada,
Tranquilo queda mi corazón.

Creciendo irán poco a poco
Lso alegres pensamientos
Cuando ya estés florecidos
Irá lejos tu recuerdo.
De la flor de la amapola
Seré su mejor amiga,
La pondré bajo de la almohada
Para dormirme tranquila.

Para mi tristeza violeta azul,
Clavelina rosa pa´ mi pasión
Y para saber si me corresponde 
Deshojo un blanco manzanillón.
Si me quiere mucho, poquito, nada,

Tranquilo queda mi corazón




___________________________________



PABLO NERUDA
Enero 19 en automóvil entre Isla Negra y Casablanca.
(1970)


Elegía para cantar



I



¡Ay, qué manera de caer hacia arriba
y de ser sempiterna, esta mujer!

De cielo en cielo corre o nada o canta
la violeta terrestre:
la que fue, sigue siendo,
pero esta mujer sola
en su ascensión no sube solitaria:
la acompaña la luz del toronjil,
del oro ensortijado de la cebolla frita,
la acompañan los pájaros mejores,
la acompaña Chillán en movimiento.

¡Santa de greda pura!

Te alabo, amiga mía, compañera:
de cuerda en cuerda llegas
al firme firmamento,
y, nocturna, en el cielo, tu fulgor
es la constelación de una guitarra.

De cantar a lo humano y lo divino,
voluntariosa, hiciste tu silencio
sin otra enfermedad que la tristeza.


II


Pero antes, antes, antes,
ay, señora, qué amor a manos llenas
recogías por los caminos:
sacabas cantos de las humaredas,
fuego de los velorios,
participabas en la misma tierra,
eras rural como los pajaritos
y a veces atacabas con relámpagos.

Cuando naciste fuiste bautizada
como Violeta Parra
el sacerdote levantó las uvas
sobre tu vida y dijo
"Parra eres y en vino triste te convertirás".

En vino alegre, en pícara alegría,
en barro popular, en canto llano,
Santa Violeta, tú te convertiste,
en guitarra con hojas que relucen
al brillo de la luna,
en ciruela salvaje
transformada,
en pueblo verdadero,
en paloma del campo, en alcancía.


III


Bueno, Violeta Parra, me despido,
me voy a mis deberes.

¿Y qué hora es? La hora de cantar.

Cantas.
            Canto.
                     Cantemos.




________________________




NICANOR PARRA:


Defensa de Violeta Parra



Dulce vecina de la verde selva
Huésped eterno del abril florido
Grande enemiga de la zarzamora
Violeta Parra

Jardinera
            locera
                      costurera 
Bailarina del agua transparente
Árbol lleno de pájaros cantores
Violeta Parra.

Has recorrido toda la comarca
Desenterrando cántaros de greda
Y liberando pájaros cautivos
Entre las ramas.

Preocupada siempre de los otros
Cuando no del sobrino
                                    de la tía
Cuándo vas a acordarte de ti misma
Viola piadosa.

Tu dolor es un círculo infinito
Que no comienza ni termina nunca
Pero tú te sobrepones a todo
Viola admirable.

Cuando se trata de bailar la cueca
De tu guitarra no se libra nadie
Hasta los muertos salen a bailar
Cueca valseada.

Cueca de la Batalla de Maipú
Cueca del Hundimiento del Angamos
Cueca del Terremoto de Chillán
Todas las cosas.

Ni bandurria
               ni tenca
                            ni zorzal
Ni codorniza libre ni cautiva
         solamente tú
                         tres veces tú
                             Ave del paraíso terrenal.

Charagüilla
                     gaviota de agua dulce
Todos los adjetivos se hacen pocos
Todos los sustantivos se hacen pocos
Para nombrarte.

Poesía
             pintura
                           agricultura
Todo lo haces a las mil maravillas
Sin el menor esfuerzo
Como quien se bebe una copa de vino

Pero los secretarios no te quieren
Y te cierran la puerta de tu casa
Y te declaran la guerra a muerte
Viola doliente.

Porque tú no te vistes de payaso
Porque tú no te compras ni te vendes
Porque hablas la lengua de la tierra
Viola chilensis.

¡Porque tú los aclaras en el acto!

Cómo van a quererte
                     me pregunto
Cuando son unos tristes funcionarios
Grises como las piedras del desierto
¿No te parece?

En cambio tú
                  Violeta de los Andes
Flor de la cordillera de la costa
Eres un manantial inagotable
De vida humana.

Tu corazón se abre cuando quiere
Tu voluntad se cierra cuando quiere
Y tu salud navega cuando quiere
Aguas arriba.

Basta que tú los llames por sus nombres
Para que los colores y las formas
Se levanten y anden como Lázaro
En cuerpo y alma.

¡Nadie puede quedarse cuando tú
Cantas a media voz o cuando gritas
Como si te estuvieran degollando
Viola volcánica!

Lo que tiene que hacer el auditor
Es guardar un silencio religioso
Porque tu canto sabe adónde va
Perfectamente.

Rayos son los que salen de tu voz
Hacia los cuatro puntos cardinales
Vendimiadora ardiente de ojos negros
Violeta Parra.

Se te acusa de esto y de lo otro
Yo te conozco y digo quién eres
¡Oh corderillo disfrazado de lobo!
Violeta Parra.

Yo te conozco bien hermana vieja
Norte y sur del país atormentado
Valparaíso hundido para arriba
¡Isla de Pascua!

Sacristana cuyaca de Andacollo
Tejedora a palillo y a bolillo
Arregladora vieja de angelitos
Violeta Parra.

Los veteranos del Setentainueve
Lloran cuando te oyen sollozar
En el abismo de la noche oscura
¡Lámpara a sangre!

Cocinera
                niñera
                           lavandera
Niña de mano
                  todos los oficios
Todos los arreboles del crepúsculo
Viola funebris.

Yo no sé qué decir en esta hora
La cabeza me da vueltas y vueltas
Como si hubiera bebido cicuta
Hermana mía.

Dónde voy a encontrar otra Violeta
Aunque recorra campos y ciudades
O me quede sentado en el jardín
Como un inválido.

Para verte mejor cierro los ojos
Y retrocedo a los días felices
¿Sabes lo que estoy viendo?
Tu delantal estampado de maqui.

Tu delantal estampado de maqui.
¡Río Cautín!
                 ¡Lautaro!
                             ¡Villa Alegre!
¡Año mil novecientos veintisiete
Violeta Parra!

Pero yo no confío en las palabras
¿Por qué no te levantas de la tumba
A cantar
               a bailar
                           a navegar
En tu guitarra?

Cántame una canción inolvidable
Una canción que no termine nunca
Una canción no más
                        una canción
Es lo que pido.

Qué te cuesta mujer árbol florido
Álzate en cuerpo y alma del sepulcro
y haz estallar las piedras con tu voz
Violeta Parra

Esto es lo que quería decirte
Continúa tejiendo tus alambres
Tus ponchos araucanos
Tus cantaritos de Quinchamalí

Continúa puliendo noche y día
Tus tolomiros de madera sagrada
Sin aflicción
                 sin lágrimas inútiles

O si quieres con lágrimas ardientes
Y recuerda que eres
Un corderillo disfrazado de lobo.




_______________________________________



PABLO DE ROKHA
París, 1 de junio de 1964.



Violeta y su guitarra



La gran placenta de la tierra la está pariendo cuotidianamente, como a un niño de material sangriento e irreparable, y el hambre milenaria y polvorosa de todos los pueblos calibra su vocabulario y su idioma folklórico, es decir, su estilo, como su destino estético y no a la manera de las categorías.

Por eso es pueblo y dolor popular, complejo y ecuménico en su sencillez de subterráneo, porque el pueblo e complejo, sencillo, tremendo e inmortal, como sus héroes, criado con leche de sangre.

Tiene su arte aquella virtud de salud, que es vital y mortal simultáneamente, de las honestas, recias, tremendas yerbas medicinales de Chile, que aroman las colinas o las montañas y las arañan con su olor a sudor dl mundo del futuro, o de lo remoto antiquísimo, y son como látigos de miel dialéctica, con hierro adentro, en rebelión contra el yugo.

Yo no defino así ni el volumen ni el tamaño social de su estilo; no, me refiero a la cualidad que la orienta a ella y su guitarra y aun la pintura en proverbio o la tonada revolucionaria, a su guitarra y a ella, porque ella no es una guitarra con mujer, sino una mujer con guitarra.

Por debajo, en el total denominador común humano, su folklore, no snob, se entronca a la Picaresca española, construida con la entraña popular, interfiriéndolo; un catolicismo, más pagano que cristiano, llora, sonríe, brama en el subsuelo; aquel humor feliz de sentirse desaventurado de coraje dramatiza la guitarra y de tan ingenuo es macabro, como la gárgola de la Catedral Gótica, como Rabelais o como el Aduanero Henri Julien Rousseau, o Bosch, el fraile terrible.

Saludo a Violeta, como a una "cantora" americana de todo lo chileno, chilenísimo y popular, entrañablemente popular, sudado y ensangrentado y su gran enigma, y como a una heroica mujer chilena.




Prólogo de "Décimas : Autobiografía en verso"





DIEGO LEBEDINSKY [9123]

$
0
0


Diego Lebedinsky
Nacido en Buenos Aires, Argentina, en Agosto de 1973. Entre sus publicaciones se encuentran: El jardín de la impaciencia (Aurelia Rivera, 2003); Verdes Chinos (Zorra poesía, 2005); Antología casi literaria, Lxs célebres desconocidos (Nunca tengo razón, Rafaela, Santa Fe, 2008); Dos mil doce (Editorial cartonera Pancho Bailes, México, 2011). Con El Freak del Amor, su alter ego, publicó Amor normal (Color Pastel, 2011). Lideró la banda poético-musical "Freak del amor & las bellas vinagres" y colaboró poniendo su voz y textos de su autoría en las producciones discográficas de grupos musicales tales como: Convido (Creer o Reventar, 2009), Miss Bolivia (Alhaja, 2010), La Cosa Mostra (Grandes éxitos, 2011)






Voy buscando
en el calor del cuerpo
una palabra
que se quiera pronunciar
a favor o en contra del silencio.





Ahora mismo
soy dos cuerpos
uno que quiere decir
y otro que quiere callar.






Los músculos se estiran
para unir en una fuerza
la idea y el cuerpo

son silenciosos
como la saliva

lentos
pero eficaces
para su desgracia.








Desde acá
mis ojos rudimentarios
enmarcan la vida 

disfrutan
de un desfile a contraluz
extraordinario

donde cada uno
va a buscar la muerte 
en su destino.






La soledad 
es muy parecida a esta hora.

La misma hora todo el tiempo.

Con la noche reducida 
a luces de coches 
que se deforman 
al pasar veloces

chorrean curvas de calor
giran
se detienen

escupen humos tormentosos
como diablos brillantes
dentro de la oscuridad.






Venenosa costumbre
de hablar con las sombras 
callejeras
inoportunas
justicieras.

La noche y yo
y la velocidad de la noche.

A pesar del miedo
y las sensaciones extrañas
que se desparraman
manchan a su antojo
mi cuerpo mortal
sigo acá
observando 
el acontecer del mundo.

Nadie va a sonreír hoy
no encontraría motivos.







Voy a deambular sobre la noche
con mis manos.

Voy a recordar 
mi propia oscuridad.

Voy a ser y estar.







Las personas
se olvidan 
mientras hablan

desangran 
ocultan.

¿Quién sabe?

No voy a dar tregua.







He visto cuerpos
caer por amor
intoxicación
olvido.

Los he visto saltar
desde lo alto de un edificio
y vi la sangre de aquellos muertos
estampada en el asfalto.

He visto sonrisas
volverse monstruos
y monstruos 
comiéndose a sí mismos

y muchas vidas vi
convertirse en pesadillas.









Aleteo



Y amanece al fin
secan sus lágrimas
las hojas abandonadas
detrás de las puertas
colores de cielo
lejos de tus manos
de tus dobles filos
malignos
cortan a la mitad
la presencia y la ausencia
se hacen tronos inviolables
los cajones te ocultan
no me atrevo a ver dentro
de esa especie de muerte
que el tiempo
engulle
y disipa tu orilla
de arena revuelta
movediza.








Se mueve loca
el agua
la sal
por mi espalda
por los poros rebalsados
de tu piel
cielo redondo
en los ojos
trampolines en la boca
cobardes tal vez

la niña fascina
en su música
en sus palabras
se mueve loca
la flor soñada.







se caen estrellas
dentro de tus ojos
resplandores
que hacen de día
a la noche
          primavera que se enreda en mis brazos
dejaré que te duermas
en los jardines
de mi hombro
enloquecido

en el suave murmullo
de San Telmo
antiguo
           tibio
con sus bolas amarillas
iluminando las plazas.







La voz se hace dilema
y el canto del humo
coloreando los ojos
brilla
desde la punta de los labios

cuerpito que el viento
acerca a mis brazos

me gusta el invierno
porque junta a las personas: calor humano.







Se abre la herida
se seca

en esta boca sin nombre
en este podio pulverizado
donde tu piel hizo estragos
en mi piel

donde el juego
nos abrió la espalda
y nos tapo los ojos
con estrellas negras
de musgo.







La mañana
puede descansar
a los pies de tus ojos

hijos derretidos de la noche

esperan la luz
su calor amarillo
sus recuerdos
en los contornos
sus manchas
en las paredes.







Rasgado
el espejo a los pies de la cama
la sutura
desmayó los lazos
 y nada queda
nada entero

se corren las palabras
se escapan
desde tu boca
hacia el vacío

solo el polvo
masticándose los codos

solo el silencio.







Caigo en tus ojos
en el poema
que volvió
desde tus sombras

las manos
perdidas
irremediables
te nombran
te buscan
te estrangulan

el vacío
en la playa
la alegría de verte
tumbada en la arena
desnuda
esperando el mundo
de mis labios

esperando...







Desde aquí
desde este silencio en los hombros
desde las ampollas en las manos
desde estos versos sin sueño
desde el dolor de la víctima
desde la primavera desdentada
desde el recuerdo que se acerca
desde voz que te vas
o que te fuiste
arrancando las puertas
bajando las escaleras de dos en dos

desde este sismo cortado con tijeras
desde la muerte de las flores
desde el sonido de tu voz ennegrecida
desde el eco de la piel jugando
desde las tardes amarillas en tu vestido verde
desde los besos extinguidos
desde la luz tibia del domingo
desde este hueco en la pared
desde el ojo de carne
desde la vida en mi poesía
desde este poema
que podría no acabar nunca
desde que ya no te extraño
pero te recuerdo...







No escucha
se duerme
el lomo de la serenidad
haciendo ecos silenciosos
con la luz

falso guiño
falsa escuadra
mi mano se perdió
en el espejismo

acomodó su huella
en el polvo
que opaca a las cosas olvidadas

se fue
                                          lejos

apenas perceptible la lengua de estrellas
persigue fantasmas
                                       conejo de Alicia




AGUSTÍN LINUESA CÁCERES [9124]

$
0
0




Agustín Linuesa Cáceres nace en Valencia en 1986. En Valencia también estudia, come y duerme, trabaja y escribe, no siempre en este orden. Algunos de sus poemas fueron publicados en Estaciones Desnudas (Cocó, 2007). Cuatro años más tarde ve la luz La ciudad de los gatos, su primer poemario, que aparece abriendo un nuevo camino en su particular contribución al espacio de la poesía.





LA VERDAD es un tigre hambriento de la tierra y de las manos

que ha de perseguirnos infinito
y devolvernos el amor de los antiguos druidas
que destroce los templos y manzanas

Un amor como un demonio que nos detenga el alma de nuevo.

(La Ciudad de los Gatos, Editorial Cocó)







Coloque aquí su fotografía…

amábamos a dios y a los policías en aquel entonces
en la séptima caricia te volvías hemorragia y
venías y
me decías ardor en el estómago y
me entregabas la carne de los ciervos tan tierna y
esparcías la ciencia que yo más odiaba sobre la cerveza helada todavía

amábamos a dios y a América porque no era bella

y vomitábamos café con las piernas abiertas
nos estallaban los ojos de luz roja, yo
me sentía vivo en las tormentas, conducía entre la nieve, 
me tomaba fotografías en la cascada, follábamos también al norte,
que era pálido como un cuerpo seco, amábamos

a dios y / a los policías porque / amábamos
también a los miserables sin pan, como al Rock & Roll

como a los peces y las esquinas
los ascensores los cementerios las autoescuelas las comisarias
los parques los insectos la facultad los grandes almacenes
los incendios
las escaleras amé
incluso a los que jamás aparecen en poemas,
a todos esos, a los asesinos, a los violadores, a los diputados
amé hasta por los dientes

pero ahora
te regalan bicicletas
tienes palabras hermosas, genitales aplastados, tienes tu nombre
en un cuerpo ajeno
ahora ceniza sobre la carne

yo que tan solo sé destripar mariposas, que no aprendí jamás
ningún oficio que no fuera el de roca, o el de trigo de ciento, merodeador o
tierra prometida
que masturbé tu cuerpo rosado tantas veces como pude, yo
que tuve miedo de Inglaterra / amé y sin embargo
me mantengo con vida”







Muerte del Niño-Serpiente

Yo sé que van a matarte

Y no habrá salud o cisne rojo que
te vuelva los párpados.
Ni madre que cante, o te retire la muerte del resto del cuerpo

Yo sé que van a matarte.

Por querer regresar ahí, donde estuviste en la muerte de todas las cosas,
los que arrancan la carcajada del pecho triste.
De tu pecho pequeño y estallado en esfera, sembrado
en los cementerios del país.

Llovieron
En tu sonrisa de conflicto, cuando el mar se hizo roca o plomo

Con tus dedos pequeños de tiza / jugabas con balas entre los dedos mordidos /
Jugabas con tizas pequeñas

Yo sé que van a matarte y
Nadie
Te cubrirá cuando el bombardeo,
Cuando

hermosa la nana de tu muerte de niño-serpiente, en el lugar elegido
desde el que observan armados
la sangre, los otros

Yo sé que van a matarte y no habrá nadie que te despida
o te nombre

Y no habrá madre / No
No habrá madre y
las libélulas calladas te besaran la boca.






“de amor y otras sustancias”

--fragmento--


“la que alimenta tu boca y cercena tu voz, la que impide el canto del marinero, el nacimiento del dragón, el ala de avestruz
como una infección es la serpiente
la espiral que ha de resumir el proyecto de nuestras calaveras, el horror de nuestros hijos
la que colmó de óbito los sueños
y permite el asco en cualquier episodio de amor”








Poema I

Lo más hermoso fue su llanto
y sus ojos después del llanto, ahora
los errores de la máquina nefasta del hombre
devoran sus comisuras como una legión
de ratas hambrientas
Su delito no es mayor que el de los lobos
que se alimentan y tienen frío.




Poema II

Luego el cristal y las manos lentas,
apenas el sexo lamido me despertaba era un hombre bueno
y repartía mis habas a los mocosos
y dibujaba con frío figuras en la mañana con unos dedos
inventando acertijos,
preguntándonos si quizás una escalera bajo la nieve
Alguien amable que yaciera por
colocar semillas buenas entre su boca redonda
y ver crecer a los muchachos
que hubieran nacido como dientes
esperando el plomo de la bala.




Poema III

Piano, los gatos
empapados que comprenden,
que gritan en el autobús de vuelta a casa,
en las escuelas y hospitales gritan
con hambre de peces amarillos
Recorren eléctricos el esqueleto de asfalto
Atraviesan el himen, aspiran sexos rizados
Las mañanas cerradas en un puño de río
Descalzos ante las multitudes, desvistiéndose en el rumor del hombre
nuevo
Sacudiéndose bandera y organismo
Piano,
Licántropo licor de la tierra
Tierno, como mi amor por las esdrújulas
Rostro de pájaros, estirpe fragmentándose
como una rama seca
Latiendo tierno de petróleo, piano
En el tiempo de Caín
alimentándose de moscas.






Acontecimiento(s)

La gente
se agolpaba sobre el asfalto
mirando al cielo,
donde se libraba
la asombrosa persecución

mirábamos también nosotros
tú /
yo / y unos cuantos
indignados por la barbarie
que ante nosotros se aplaudía

la figura sobrevolaba nuestras cabezas
realizando cabriolas
y movimientos
bellos y arriesgados

tras él, varias decenas de
aviones de guerra y helicópteros militares
imitaban a duras penas el vuelo
de la figura para darle caza

desde el suelo, a escasos metros
de nosotros de ti /
de mi /
y de unos cuantos
las armas de algunos agentes de la ley
escupían con furia sobre aquel ser
que sin duda
parecía venir de otro mundo

finalmente el macabro espectáculo terminó

El alborotado gentío
Se sobrecogió cuando uno de los misiles lanzados
por uno de los aviones
Impactó
sobre el perseguido,
que no tardó demasiado
en chocar contra el suelo

me pareció que mientras caía
durante algunos instantes
había mirado hacia nosotros
hacia ti /
hacia mi /
(y hacia unos cuantos)

todos aplaudieron a la vez que exclamaban

“hemos
derribado
a un Ángel”







ERRI DE LUCA [9125]

$
0
0




Erri De Luca
Nápoles, ITALIA 1950

Nació en Nápoles en 1950. A los dieciocho años participó en el movimiento del 68 y posteriormente fue miembro del grupo Lotta Continua. Ha trabajado como albañil y camionero, y durante la guerra de los Balcanes fue conductor de vehículos de apoyo humanitario. Es un apasionado alpinista. Es autor de más de cincuenta obras, entre las que destacan: Aquí no, ahora no (1989), Tú, mío (1998), Tres caballos (1999), Montedidio (2002), o El peso de la mariposa (2009). Aprendió de forma autodidacta diversas lenguas, como el hebreo o el yiddish, y ha traducido al italiano numerosos textos, entre ellos algunos de los libros de la Biblia. Considerado uno de los autores italianos más importantes de todos los tiempos, sus libros han sido traducidos a 23 idiomas. Ha sido galardonado con varios premios, entre los que destacan el Premio France Culture y el Femina Étranger en Francia, o el Premio Petrarca en Alemania.

OBRA:

Non ora, non qui, Feltrinelli, 1989
Una nuvola come tappeto, Feltrinelli, 1991
Aceto, Arco baleno, Feltrinelli, 1992
I colpi dei sensi, Fahrenheit 451, Milano, 1993
Prove di risposta, Edizioni Nuova Cultura, Roma, 1994
In alto a sinistra, Feltrinelli, 1994
Pianoterra, articoli, Qiqajon, Bose, Magnano, 1995
"Il cronista scalzo e altri scritti", Legatoria del Sud
Alzaia, Feltrinelli, 1997
Ora prima, Qiqajon, Bose, Magnano, 1997
Tu, mio, Feltrinelli, 1998 (Me, You, Other Press)
"Tufo", Dante & Descartes, 1999
Tre cavalli, Feltrinelli, 1999 (Three Horses, Other Press)
"Un papavero rosso all'occhiello senza coglierne il fiore", Interattiva, 2000
Montedidio, Feltrinelli, 2002 (God's Mountain, Other Press)
Opera sull'acqua e altre poesie (poetry), Einaudi, 2002
"Lettere da una citta' bruciata", Dante & Descartes, 2002
Nocciolo d'oliva, EMP, 2002
Il contrario di uno, Feltrinelli, 2003
"Immanifestazione", Dante & Descartes, 2003
"Morso di luna nuova. Racconto per voci in tre stanze", Mondadori, 2004
"Precipitazioni", Dante & Descartes, 2004
"Chisciottimista", Dante & Descartes, 2005
In nome della madre, Feltrinelli, 2006
Sulla traccia di Nives, Mondadori, 2006
"Napolide", Dante & Descartes, 2006
"Sottosopra" (with Gennaro Matino), Mondadori, 2007
"lettere fraterne" (with Izet Sarajilic), Dante & Descartes, 2007
"L'isola e' una conchiglia", La Conchiglia, 2008
"Almeno cinque" (with Gennaro Matino), Feltrinelli, 2008
"L'ospite incallito" (poetry), Einaudi, 2008
"Il cielo in una stalla", Infinito, 2008
Tentativi di scoraggiamento (a darsi alla scrittura), Dante & Descartes, 2009 (Attempts at discouragement (when taking up writing))
"Penultime notizie circa Ieshu/Gesu'", Messaggero, 2009
Il giorno prima della felicità, Feltrinelli, 2009 (The Day Before Happiness, Other Press)
Il peso della farfalla, Feltrinelli, 2009
Tu non c'eri, Dante & Descartes, 2010
"Rivolte inestirpabili", Forum Edizioni, 2010
E disse, Feltrinelli, 2011
"Le sante sello scandalo, La Giuntina, 2011
"I pesci non chiudono gli occhi", Feltrinelli, 2011
"Il turno di notte lo fanno le stelle", Feltrinelli, 2012 ("The Nightshift belongs to the Stars")
"Il torto del soldato", Feltrinelli, 2012
"Il Turno di Notte lo fanno le Stelle", OH!PEN/Feltrinelli, 2012
"La doppia Vita dei Numeri", Feltrinelli, 2012
"The Nighshift Belongs to the Stars", Feltrinelli 2012





DESPUÉS

No los del bunker,
no los que tengan reservas de alimentos,
ninguno de ciudad,
se salvarán los indios, cachemires, masai,
beduinos protegidos del viento, mongoles a caballo;
también uno de Nápoles escondido en el Vesubio,
y un judío envuelto en un enjambre de palabras,
ilesos por pura tradición en un horno que arde.
Se salvarán más mujeres que hombres,
más peces que mamíferos,
desaparecerá el rock and roll, quedarán las plegarias,
desaparecerá el dinero, y volverán las conchas.
La humanidad serán pocos, mestizos, nómadas,
se moverán a pie. Y su botín, la vida:
la riqueza más grande que se puede transmitir a un hijo.

en el libro Solo andata






Considero valores todas las heridas

Considero valor cada forma de vida, la nieve, la fresa, la mosca. 
Considero valor el reino mineral, el conjunto de las estrellas. 
Considero valor el vino junto a la pasta, una sonrisa involuntaria, 
el cansancio que no niegan dos viejos que se gustan. 
Considero valor lo que mañana no valdrá nada y lo que hoy ya vale poco.
Considero valor todas las heridas.
Considero valor ahorrar agua, reparar zapatos, callar a tiempo, 
socorrer a gritos, pedir permiso antes de sentarse, probar gratitud 
sin recordar bien el porqué. 
Considero valor poder saber donde está el norte en una habitación 
y el nombre del viento que seca la ropa. 
Considero valor el viaje del vagabundo, lo clausura del monje, 
la paciencia del condenado sea cual sea su culpa. 
Considero valor emplear el verbo amar y la hipótesis 
que un creador existe.
Muchos de estos valores no los he conocido.

Traducción de Georgina Rôo




Considero Valore

Considero valore ogni forma di vita, la neve, la fragola, la mosca.
Considero valore il regno minerale, l'assemblea delle stelle.
Considero valore il vino finché dura un pasto, un sorriso involontario, 
la stanchezza di chi non si è risparmiato, due vecchi che si amano.
Considero valore quello che domani non varrà più niente e quello 
che oggi vale ancora poco.
Considero valore tutte le ferite.
Considero valore risparmiare acqua, riparare un paio di scarpe, 
tacere in tempo, accorrere a un grido, chiedere permesso 
prima di sedersi, provare gratitudine senza ricordarsi di che.
Considero valore sapere in una stanza dov'è il nord, qual è il nome 
del vento che sta asciugando il bucato.
Considero valore il viaggio del vagabondo, la clausura della monaca, 
la pazienza del condannato, qualunque colpa sia.
Considero valore l'uso del verbo amare e l'ipotesi 
che esista un creatore..
Molti di questi valori non ho conosciuto.







Due

Quando saremo due saremo veglia e sonno
affonderemo nella stessa polpa
come il dente di latte e il suo secondo,
saremo due come sono le acque, le dolci e le salate,
come i cieli, del giorno e della notte,
due come sono i piedi, gli occhi, i reni,
come i tempi del battito
i colpi del respiro.
Quando saremo due non avremo metà
saremo un due che non si può dividere con niente.
Quando saremo due, nessuno sarà uno,
uno sarà l'uguale di nessuno
e l'unità consisterà nel due.
Quando saremo due
cambierà nome pure l'universo
diventerà diverso.




HÉLÈNE CADOU [9126]

$
0
0



Hélène Cadou, nació en Mesquer (Loira Atlántico), FRANCIA en 1922, escribió una importante obra poética (Precio Verlaine 1990). 

PUBLICACIONES:

Publications[modifier]

Trois poèmes, P.A. Benoît, 1949
Le bonheur du jour, Seghers, 1956
Cantate des nuits intérieures, Seghers, 1958
Les pèlerins chercheurs de trèfle, Rougerie, 1977
Le Jour donne le signal, Les Cahiers du Val Saint-Père, Caen, 1981
En ce visage, l'avenir, J. Brémond, 1977 (réed. 1984)
Miroirs sans mémoire, Rougerie, 1979
Le jour donne le signal, Le Pavé, 1981
Une ville pour le vent qui passe, Rougerie, 1981
Longues pluies d'Occident, Rougerie, 1983
L'Innominée, J. Brémond, 1983
Poèmes du temps retrouvé, Rougerie, 1985
Demeures, Rougerie, 1989
Mise à jour, Librairie Bleue, 1989
L'instant du givre, R. Bonargent, Châteauroux, 1993
Retour à l'été, Maison de Poésie / Éditions Serpenoise / Presses Universitaires de Nancy, 1993
La mémoire de l'eau, Rougerie, 1993
Le pays blanc d'Hélène Cadou, avec des photographies de Christian Renaut, Jean-Marie Pierre, 1996
Le livre perdu, Rougerie, 1997
C'était hier et c'est demain, Préface de Philippe Delerm, Éditions du Rocher, 2000
De la poussière et de la grâce, Rougerie, 2000
Si nous allions vers les plages, Rougerie, 2003
Une vie entière : René Guy Cadou, la mort, la poésie, Editions du Rocher, 2003
Le Prince des lisières, Rougerie, 2007
Le Bonheur du jour, suivi de Cantate des nuits intérieures, réédition de ses premiers recueils, préface de Jean Rouaud. Éditions Bruno Doucey, 2012.




Ahora que no encuentro ya más tu rostro

Ahora que no encuentro ya más tu rostro
A la deriva tras el espesor de los días
Y ahora que ya tu voz me llega tan queda 
Que no sé ya escuchar tu canto
Será acaso preciso olvidar tu imagen
Perderme sin ti en otra noche
Para que al fondo de la sombra y la zozobra
Nazca la primavera que nos está prometida.

Has vuelto a mí esta mañana
El sol irrumpiendo en la casa
Si supiera yo retenerlo
En la vasija de un bello día
Quizá vendrías tú a veces
A hacer pausa en mitad de tu noche
Y dormir de nuevo conmigo
En el ámbar de sus hilos.

Había tanto silencio
Tanta presencia en esta alcoba
Tanta luz lucía
En nuestros labios la misma sonrisa
Que cuando Ella vino hacia ti
Ella tenía rostro de primavera.

Sé que tú me inventaste
Que yo nací de tu mirada
Tú que dabas luz a los árboles
Pero desde que me dejaste
Por un sueño que te devora
Me esfuerzo por volver a darte
En el nido tembloroso de mis manos
Un atisbo de día cuya dulzura baste
Para obligarte a volver a la vida.

© Traducción: Índigo





Déjà je ne trouve plus ton visage, Hélène Cadou

Dejà je ne trouve plus ton visage
Qui dérive sous l'epaisseur des jours
Et déjà ta voix m'arrive si basse
Que je ne sais plus écouter ton chant
Me faudra-t-il oublier ton image
Me perdre sans toi dans une autre nuit
Pour qu'au fond de l'ombre et de la souffrance
Naisse le printemps qui nous est promis.


Tu m'es revenu ce matin
Le soleil est sur la maison
Si je savais le retenir
Dans la corbeille d'un beau jour
Peut-être viendrais-tu parfois
Faire halte au milieu de ta nuit
Et dormir encore avec moi
Dans la paille de ses rayons.


Il y avait tant de silence
Tant de présence dans cette chambre
Toutes les lampes
Sur nos lèvres le même sourire
Que lorsqu'Elle est venue vers toi
Elle avait le visage du printemps.



Je sais que tu m'as inventée
Que je suis née de ton regard
Toi qui donnais lumière aux arbres
Mais depuis que tu m'as quittée
Pour un sommeil que te dévore
Je m'applique à te redonner
Dans le nid tremblant de mes mains
Une part de jour assez douce
Pour t'obliger à vivre encore.

© Hélène Cadou, poema extraído del libro Le bonheur du jour, suivi 
de Cantate des nuis intérieures, Éditions Bruno Doucey, 2012
http://indigohorizonte.blogspot.com.es/






[CUANDO NIÑA]

Cuando niña
Temía que el pozo
Abierto en lo hondo del jardín

Fuera un ojo abierto
Hacia el fondo de la tierra
Una mirada

Que permitiera ver
La noche de los tiempos

Y rechazaba el antojo
De tomarlo como espejo

Tal era el miedo a que mi cara
En él se perdiera


http://losvalientesandansolos.blogspot.com.es/

GEORGIA DOUGLAS JOHNSON [9127]

$
0
0


Georgia Douglas Johnson
Georgia Blanche Douglas Camp Johnson más conocida como Georgia Douglas Johnson (nació en Atlanta EE.UU. el 10 septiembre 1880 y murió el 14 mayo 1966) fue una poeta americana miembro del renacimiento de Harlem.

OBRA:

The Heart of a Woman (1918)
Bronze (1922)
An Autumn Love Cycle (1928)
Share My World (1962)
A Sunday Morning in the South (1925)





EL CORAZÓN DE UNA MUJER:

El corazón de una mujer sale con el amanecer,
como un ave solitaria, en blando vuelo, con impaciencia,
lejos sobre las torres y los valles de la vida vaga
para suscitar esos ecos que el corazón llama hogar.

El corazón de una mujer vuelve con la noche,
y entra en alguna extraña jaula de esponsales,
y trata de olvidar que soñó con las estrellas,
mientras se rompe, se rompe, se rompe contra
los barrotes que la amparan.

Publicado por David de San Andrés en 
http://losvalientesandansolos.blogspot.com.es/




Common Dust

And who shall separate the dust
What later we shall be:
Whose keen discerning eye will scan
And solve the mystery?

The high, the low, the rich, the poor, 

The black, the white, the red, 

And all the chromatique between, 

Of whom shall it be said:

Here lies the dust of Africa; 

Here are the sons of Rome; 

Here lies the one unlabelled, 

The world at large his home!

Can one then separate the dust? 

Will mankind lie apart, 

When life has settled back again 

The same as from the start?




Foredoom

Her life was dwarfed, and wed to blight,
Her very days were shades of night,
Her every dream was born entombed,
Her soul, a bud,—that never bloomed.

The Heart of a Woman and Other Poems (The Cornhill Company, 1918)






My Little Dreams

I’m folding up my little dreams
   Within my heart tonight,
And praying I may soon forget
   The torture of their sight.

For time’s deft fingers scroll my brow
   With fell relentless art—
I’m folding up my little dreams
   Tonight, within my heart.

The Heart of a Woman and Other Poems (The Cornhill Company, 1918)




GWENDOLYN B. BENNETT [9128]

$
0
0


Gwendolyn B. Bennett
Gwendolyn B. Bennett (Nació en Giddings, Texas el 8 julio 1902 a 30 mayo 1981). Fue una poeta afro-americana 

OBRA:

POESÍA:

1923 — "Heritage" Opportunity (Dec)
1923 — "Nocturne" Crisis (Nov)
1924 — "To Usward" Crisis (May) and Opportunity (May)
1924 — "Wind" Opportunity (Nov)
1925 — "On a Birthday" Opportunity (Sept)
1925 — "Pugation" Opportunity (Feb)
1926 — "Song" Palms (Oct)
1926 — "Street Lamps in Early Spring" Opportunity (May)
1926 — "Lines Written At the Grave of Alexandre Dumas" Opportunity (July)
1926 — "Moon Tonight" Gypsy (Oct)
1926 — "Hatred" Opportunity (June)
1926 — "Dear Things" Palms (Oct)
1926 — "Dirge" Palms (Oct)
1934 — "Epitaph" Opportunity (Mar)






ODIO

Te odiaré
como un dardo de acero cantarín
que rasga el aire tranquilo
del manto de la noche.
O con gesto solemne,
igual que los sobrios pinos
que se yerguen
hacia el cielo.
Odiarte será un juego
para solaz de manos frías
y ágiles dedos.
Tu corazón anhelará
el solitario esplendor
del pino;
mientras las llamas ardientes
de mis ojos
te herirán como raudas flechas.
El recuerdo posará sus manos
sobre tu pecho,
y comprenderás entonces
mi odio

Traducción de Raquel Vázquez Ramil





To a Dark Girl

(A una niña morena)

Te amo por tu tez morena, 
Y la oscuridad redondeada de tu pechos, 
Te amo por la tristeza rota en tu voz 
Y las sombras donde tus parpados caprichosos reposan.

Algo de viejas reinas olvidadas 
Acecha en el ligero abandono de tu caminata 
Y algo de la esclava encadenada 
Solloza en el ritmo de tu conversación.

Oh, pequeña niña morena, nacida como compañia de la tristeza  
Quedate todo lo que tienes de realeza, 
Olvidandote que una vez fuiste esclava, 
Y deja que tus labios llenos se rian del Destino!







Song

I am weaving a song of waters,
Shaken from firm, brown limbs,
Or heads thrown back in irreverent mirth.
My song has the ush sweetness
Of moist, dark lips
Where hymns keep company
With old forgotten banjo songs.
Abandon tells you
That I sing the heart of race
While sadness whispers
That I am the cry of a soul. . . .

A-shoutin' in de ole camp-meeting-place,
A-strummin' o' de ole banjo.
Singin' in de moonlight,
Sobbin' in de dark.
Singin', sobbin', strummin' slow . . .
Singin' slow, sobbin' low.
Strummin', strummin', strummin' slow . . .
Words are bright bugles
That make the shining for my song,
And mothers hold down babies
To dark, warm breasts
To make my singing sad.

A dancing girl with swaying hips
Sets mad the queen in the harlot's eye.
        Praying slave
        Jazz-band after
        Breaking heart
        To the time of laughter . . .
Clinking chains and minstrelsy
Are wedged fast with melody.
        A praying slave
        With a jazz-band after . . . 
        Singin' slow, sobbin' low.
Sun-baked lips will kiss the earth.
Throats of bronze will burst with mirth.
        Sing a little faster,
        Sing a little faster,
        Sing!

(1926)




Lines Written at the Grave of Alexandre Dumas

Cemeteries are places for departed souls
And bones interred,
Or hearts with shattered loves.
A woman with lips made warm for laughter
Would find grey stones and roving spirits
Too chill for living, moving pulses . . .
And thou, great spirit, wouldst shiver in thy granite shroud
Should idle mirth or empty talk
Disturb thy tranquil sleeping.

A cemetery is a place for shattered loves
And broken hearts . . .
Bowed before the crystal chalice of thy soul,
I find the multi-colored fragrance of thy mind
Has lost itself in Death's transparency.
Oh, stir the lucid waters of thy sleep
And coin for me a tale
Of happy loves and gems and joyous limbs
And hearts where love is sweet!

A cemetery is a place for broken hearts
And silent thought . . .
And silence never moves,
Nor speaks nor sings.

(1926)




Hatred

I shall hate you
Like a dart of singing steel
Shot through still air
At even-tide,
Or solemnly
As pines are sober
When they stand etched
Against the sky.
Hating you shall be a game
Played with cool hands
And slim fingers.
Your heart will yearn
For the lonely splendor
Of the pine tree
While rekindled fires
In my eyes
Shall wound you like swift arrows.
Memory will lay its hands
Upon your breast
And you will understand
My hatred.

(1926)




Secret

I shall make a song like you hair . . .
Gold-woven with shadows green-tinged,
And I shall play with my song
As my fingers might play with your hair.
Deep in my heart
I shall play with my song of you,
Gently. . . .
I shall laugh
At its sensitive lustre . . .
I shall wrap my song in a blanket,
Blue like your eyes are blue
With tiny shots of silver.
I shall wrap it caressingly,
Tenderly. . . . 
I shall sing a lullaby
To the song I have made
Of your hair and eyes . . .
And you will never know
That deep in my heart
I shelter a song for you
Secretly. . . .

(1927)




Sonnets

1.

He came in silvern armour, trimmed with black--
A lover come from legends long ago--
With silver spurs and silken plumes a-blow,
And flashing sword caught fast and buckled back
In a carven sheath of Tamarack.
He came with footsteps beautifully slow,
And spoke in voice meticulously low.
He came and Romance followed in his track . .

I did not ask his name--I thought him Love;
I did not care to see his hidden face.
All life seemed born in my intaken breath;
All thought seemed flown like some forgotten dove.
He bent to kiss and raised his visor's lace . . .
All eager-lipped I kissed the mouth of Death.


2.

Some things are very dear to me--
Such things as flowers bathed by rain
Or patterns traced upon the sea
Or crocuses where snow has lain . . .
The iridescence of a gem,
The moon's cool opalescent light,
Azaleas and the scent of them,
And honeysuckles in the night.
And many sounds are also dear--
Like winds that sing among the trees
Or crickets calling from the weir
Or Negroes humming melodies.
But dearer far than all surmise
Are sudden tear-drops in your eyes

(1927)







LORENA CURRUHINCA [9129]

$
0
0




Lorena Curruhinca (1981, Viedma, Provincia de Río Negro, Argentina)
Blog: http://principiodeincertidumbre.blogspot.com.ar/

Ha publicado: "Una chica de río", Colectivo Semilla, 2012





En el vídeo Close to you
Karen Carpenter está sentada
sobre una U gigante
las piernas flotando y
moviendo la cabeza.
Todos sus gestos son delicados;
a veces quisiera tener
esa imagen de mí:
una escena fácil de recrear
una voz tierna que dice cosas
como revelación ganada.


“Ya sé lo que te diga no va a ser suficiente consuelo”,
canta Julieta Venegas.
Ante el dolor asoma el impulso del refugio materno,
también el mandato matriarcal de soportar:
mantenerse a una pared imaginaria
con la misma adherencia de un pulpo.
Tal vez sea hora de transformar los vínculos,
atreverse a la fraternidad
decir: sí, estoy triste, abrazame.
Y tener como mantra
las palabras de Rocky –la última-
en donde dice que no importan las batallas ganadas
sino todos los golpes que podés aguantar.







Jingle Bell Rock

1

La anticipación con la que los negocios arman
sus vidrieras alusivas a navidad
establecen tiempo e inmanencia:
podemos tener una caracterización del rito
-la tele enseñó que hay nieve, felicidad, canciones en coro por nenes,
jingle bells rock por Lindsay Lohan
y los mejores regalos que puedas imaginar-
aún así, cada año la exaltación hará
que la exigencia sea más grande:
los papás se visten de papá noel,
-si tomás la 503 en diciembre, el barrio palihue
se transforma en postal de película americana:
cada casa tiene paredes y árboles de su patio delantero
llenos de luces intermitentes-
hay cds de Christmas chillout
y una saturación de personas cargadas de bolsas con moñito;
el espíritu navideño se come la existencia.



2

Mi abuela venía todas las navidades
con dulce de sauco y medias coloridas,
tejidas por ella, para todos los nietos:
nosotros las estrenábamos patinando
en el piso recién encerado por mamá.
A mis hermanos y a mí, nos hacía
pan dulce sólo con nueces y chocolates
porque no nos gustaban las frutas secas;
yo miraba la cadencia con la que amasaba
-en la pieza de atrás, que usábamos de lavadero
donde había una mesa grande de madera-
con uñas rojas y el pelo siempre bello.



3

No recuerdo haber deseado con frenesí
ningún regalo específico.
Vivíamos al lado de un jardín de infantes;
venían todos nuestros tíos y primos
y jugábamos en el arenero y el tobogán
mientras mi papá hacía el asado.
Robábamos los restos de sidra mientras los grandes bailaban.
Atraída por el destello de las brasas
me acerqué tanto que me quemé las rodillas,
mi tío enfermero me curó con pasta dental.
Más que a papá noel, anhelábamos la mística de los Reyes:
dejábamos zapatillas, una palangana naranja llena de agua
para los camellos y pasto que luego desaparecían.



4

¿Habrá que mirarnos, entonces, con la extrañeza del Jack de Tim Burton?:
preguntarse sobre este festejo, decir: ¿Qué es, qué es?
por qué la insistencia en la desproporción y artificio
o el mandato de ser perfectos por un día
cuando la revelación puede ser el instante de autenticidad:
que exista la posibilidad de ser cursi y cantar:
all I want for Christmas is you
y el recuerdo de la felicidad ingenua de cuando éramos chicos
pueda actuar como la latencia de esas semillas
que soportan condiciones límites
y todas esas cosas que podían destruirlas
son las mismas que las hacen germinar.










X-men 2

Michael Phelps es el mayor medallista olímpico de todos los tiempos.
Como con todo lo extraordinario, se estudió qué causas hacen
desafiar lo teorizado acerca de las técnicas natatorias;
ignorando que la técnica, también, es carácter humano.
Sus brazadas son tan eficaces que casi no hay burbujas a su alrededor.
Su inmersión es más extensa que el resto de los nadadores:
esto evita la resistencia de olas. Michael usa la propulsión de su patada
para ir más profundo.
Su entrenador explica que  cuando él está sumergido
actúa como un delfín: imita la rigidez del mamífero,
la cual funciona de soporte mientras la parte inferior se mueve. Esto es:
propagar la potencia en toda la extensión corporal.
Phelps hace su retórica acuática desde la imposibilidad;
aguanta la respiración y se aproxima al interior.
Esa pelea, íntima, en un medio espeso
vibra y esparce para los que continúan flotando.






Hay quienes comparan nadar 
con un regreso a la panza de la madre:
revivir estar en líquido amniótico.

El saco amniótico es un recinto reducido
(se estira, estira la piel todo lo que se pueda)
que amortigua y el feto puede saltar ahí, moverse:
estar protegido de posibles golpes exteriores.

El río es un lugar inmenso, no hay paredes ni barandas
donde sostenerse.

La relación entre mamá y yo no está en el agua: 
nunca nadé soñando estar dentro de ella.
Doy brazadas sin ninguna pretensión embrionaria:
hago inmersiones sin buscar ningún sentido a nuestro vínculo
salgo a respirar como todo mamífero que sueña con ser pez
pero sabe que en el aire está su vida.

Mi mamá me enseñó a crecer 
sin tener que dejarme el traje de buceo puesto.







Nong Youhiu tiene los ojos azules, azules.
Le dicen niño-gato, porque ve en la oscuridad
y sus ojos brillan.
Nong puede cazar grillos 
sin necesidad de usar linterna.
Unos médicos lo encerraron en una habitación sin luz
le dieron cartas y una a una él indicó cuáles eran.

¿El fulgor que emite será como la bioluminiscencia
de las luciérnagas
o como el de los peces abisales? ¿Servirá de señal
de apareo o podrá utilizarlo de carnada?

¿Cómo vas a leer historietas de mutantes con un aparato con pilas,
tapado con sábanas de esos mismos seres evolucionados
si ya sos uno de ellos?
¿Tus pupilas se estrechan verticalmente, Nong?
¿Verás insectos, mascotas, parientes con visión infrarroja?
¿Podrás guiarnos según el calor que emitan nuestros cuerpos
hacia otros similares?

Un profesor nos dijo que en miles de años
se nos caerá el pelo y que no tendremos más dedos meñiques
en un salto evolutivo. Seguramente no calculó que alguien
vería donde nadie puede, acaso sin temer.
Mis hijos, entonces, ¿podrían desarrollar membranas interdigitales
como las ranas o los patos? Querrán ser como aquaman, o como Nong,
tener adaptaciones inusuales, nadar a una velocidad mayor,
soportar mayor presión acuática o tendrán miedo de ser llamados
por nombres que reverencien sus características y no poder alejarse
jamás de tener ojos azules, azules
y de que el mundo todavía no esté listo para dejar de temer a la oscuridad.

De: "Una chica de río", Colectivo Semilla, 2012


RICARDO POCHTAR [9130]

$
0
0



Ricardo Pochtar (Buenos Aires, 1942). Licenciado en Filosofía, Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Buenos Aires. En 1974 viaja a Francia para realizar estudios de doctorado en filosofía. En 1976 se traslada a Barcelona. Desde entonces reside en España. En 2004 se establece en Gijón.

Ha traducido libros del francés, inglés e italiano para editoriales de Buenos Aires, Barcelona y Madrid. Entre sus traducciones del italiano figuran obras de Giacomo Leopardi, Giuseppe Tomasi di Lampedusa, Leonardo Sciascia y Umberto Eco, con títulos tan representativos como El nombre de la rosa o El Gatopardo.

En 2010 se le otorgó el Premio Internacional de Traducción Literaria Claude Couffon (Salón del Libro Iberoamericano de Gijón). Desde 1983 es traductor de organizaciones intergubernamentales (Naciones Unidas, Organización Mundial de la Salud, Organismo Internacional de Energía Atómica, entre otras). Ha sido presidente de la Asociation internationale des traducteurs de conférence.

Junto a esta destacada trayectoria como traductor, Pochtar ha publicado varios poemarios 
-Lugar diseminado, (Buenos Aires, Grupo Editor Latinoamericano, 1993)
-Clinamen, (Trea, Gijón, 2006)  
-El efecto mariposa (Trea, Gijón, 2010).
-El tamaño de los días (Amargord, 2012)



DE: El tamaño de los días (Amargord, 2012)


El tamaño de los días

Los que escriben
de siglo en siglo
calendarios de piedra
o de cuentas de papel
- dóciles norias
para los cuatro
o cinco elementos,
si me apuran -
¿cuándo saben
los signos y las horas?
¿cómo aprenden
el tamaño de los días?





Nominalismo

No tienen mucha prisa
por salvar las apariencias,
si algo en esta vida las salpica
es el oscuro temor de la navaja:
las formas, las ideas
no nacen ni mueren,
no hay idea ni forma de la muerte,
lo que se muere es esta planta,
ese animal,
se mueren las últimas cosas,
una ola que es la última,
un abrazo,
la última vocal de una palabra.





DE: Clinamen (Gijón: Ediciones Trea, 2006)


Microteología

¿Cuántos enjambres
de ángeles
en una cabeza de alfiler?
¿En una mota de estiércol
cuántos budas?





Glosa a Sologuren

“dios es esencia: la esencia carece de forma,
de color, de textura”

dios de greda
dios-garúa
que llovizna
sobre el bullicio
de los que van vestidos
y también sobre la
muda ropa-adobe
de la ciudad desnuda





Rapsodia

Todas las noches serán
la misma noche
y el tiempo un vasto
tapiz donde los mismos
hilos urdirán
cada vez
seres distintos
toda gota del río
un río distinto
y cada pez en el agua
un mismo pez
fingiéndose distinto
en cada anzuelo
la misma llama volviendo
a encenderse en cada
vela la misma muerte
intentando nacer
en cada vida





Polvareda

Cuántos eclipses Omar
cuántos fulgores de potros
en la noche cuántas copas
de vino te harían falta
cuántas bandadas de
estorninos veladas a flor
de aire para que una mota
de polvo se vuelva,
digamos, venerable




Distancia

De pronto hueca
de la forma de tus sueños
de pronto ala
de la blancura de tu ausencia



ENRIQUE MARTÍN CORRALES [9131]

$
0
0




Enrique Martín Corrales (Valencia, 1992) es estudiante de Filosofía en la Universidad de Valencia. Ha sido, junto a Jorge Brunete, coordinador de los pliegos Las Minitrincheras, con la colaboración del café cultural El Dorado-Mae. Ha creado, de nuevo con Jorge Brunete, el blog Poesía de la Frontera. 
http://poesiadelafrontera.blogspot.com.es/
Poemas suyos han aparecido en la antología "Por donde pasa la poesía", en la revista la Hamaca de Lona, en Manuales de Instrucciones de la Fundación Inquietudes, y en Las Minitrincheras.

Ha publicado: El camino hacia la herida (Colección Varadero, nº 8, 2011)





El gobierno de Israel (gobierno de ocupación)
restringe agua en Cisjordania y Gaza,

el 95% del agua de los pozos que quedan está contaminada,

…y…
una niña turbia crece del revés,
durante este año han aparecido demasiados cadáveres secos,
lejos del mundo
destruyen auroras los camiones sin destino
y unos elefantes vendrán dentro de poco
a comer en nuestras piedras,

(ha llovido esta noche,
el agua desastrosa ha cubierto las terrazas)

los ojos lluviosos de las ancianas
avecinan tuertos relámpagos de olvido,
han pasado como cuadros tiesos en las rejas,
como un muro que se fluctúa en la arena,
los olivos tan sonrientes de espumas,

qué bonito gobierno el de Israel
(se parecen a nosotros como grillos en celo)

la toalla está seca (todavía),

la ducha espera, lenta,
al delirio del grifo.

Sonrío al espejo,

abro
        la manecilla.





La razón:

Que todo lo que subyace, crece:
el alardeo del pato en río seco,
un niño tibio de grasas,
la desaparición de las banderas,
la palabra en ristre, y con ella
el aleteo curioso del saltamontes,
que contiene todas las razones del pecado,


                           del manifiesto.

Para ello
entonces:

la voz, la piedra.


Delta:tabiques, tabiques, tabiques
y aún así
el terreno es

                           resbaladizo.


De su voz:
De su voz han tronado
los caminos
y una peste de esquelas,
por ellos decido el tránsito de la lágrima y el poro,
su fluctuación resurge del estaño
con el que la roca se deforma en el viento,
de su voz habita la pancarta y la tinta
desde el abismo, la torcedura del agua,
el arranque del verso palpitado
en horas muertas,
la vida que no revive.

De su voz habríamos de enervar todas nuestras palabras,
aquí y en sus cuevas bajar ahora la memoria
de la arena y la sangre derramada,
si su espera de abedules o su agitar de manzanas,
al mismo tiempo que
vivimos la pasividad alejándonos del giro,
yo hablo por la vasta porción de frío, de la tiniebla
diurna que permanece en sus fauces,
de su voz han tronado
las laringes y las tráqueas,

de su voz han salido
sus voces
de descarnados.







EL DOLOR

                    “El dolor es una multitud”
                     Antonio Martínez i Ferrer.


                    dolor
(en quién), quiénes,

                    y quienes
arropan las velas
                    del descanso en el descanso

mugen en las lápidas.

Los hombres únicos fueron los que llegaron calzados,

tras las ancianas sin rostro bord(e)ando horizontes,
tras los cinturones y los perros, y los gatos y la arena,
tras los cuentos de las cuerdas y los árboles,
tras las sombras del quejido, del silencio de las batallas,

tras los niños decrépitos

tras las niñas

tras las madres...

y en las camisas amarillas
de los que respiran barro

                        el dolor:

El camino hacia la herida (Colección Varadero, nº 8, 2011)





DE LADO A LADO

de lado a lado
ser algo más
–un pétalo entre poros–
tiempo
solo
ajeno
atravesar la pólvora como si fuera el amor
siendo no más que eso
poema amor y polvo






MARÇAL FONT [9132]

$
0
0

Marçal Font i Espí (Badalona, 1980). Licenciado en Teoría de la Literatura y Literatura Comparada por la Universiadad de Barcelona, con posterioridad ha cursado postgrados sobre trabajo con manuscritos medievales y del Siglo de Oro en el CSIC de Madrid. En el ámbito de las letras tiene trabajos como traductor de novela, ensayo y poesía y es coautor para la Editorial Libros del Silencio de la antología de textos clásicos sobre el amor a los libros "Libropesía y otras adicciones". Actualmente regenta la Llibreria Fènix de libros de segunda mano en su ciudad natal donde organiza recitales de poesía regularmente. Su obra literaria se ha publicado en diversas revistas, como la Revista de Erudición y Crítica de Castalia, Paralelo Sur, Iguazú o IDIOT (Eslovenia), entre otras y ha ganado algún que otro premio literario menor aquí y allá. A nivel filológico tiene trabajos publicados en la revista Manuscrit Cao de la Biblioteca Nacional de España y en el Boletín Gómez de la Serna. Su experiencia sobre los escenarios es extensa y variada, del canto lírico, al teatro y la poesía, pasando por la danza. De locales okupados, centros cívicos e iglesias de barrio a una ópera en el Gran Teatre del Liceu o recitales de poesía en el Sziget Festival de Hungría. Actualmente forma parte del grupo Quebrantaversos que ha venido organizando recitales abiertos de poesía en Barcelona y participa asiduamente en los slams del Poetry Slam Barcelona, del que fue ganador de la temporada 2010, clasificándose y ganando posteriormente la Final Nacional de España celebrada recientemente dentro del Festival Kosmópolis en el Centro de Cultura Contemporanea de Barcelona.



Gris continuo

Dedicado a quienes siguen escapando de los grises

Decían escapar del gris. Correr ante el gris.
Lo vemos en fotos grises.
Encierros de toros ratoneros ante miradas grises, sobre empedrado gris 
y bajo un sol de justicia.
Eran unos pocos cientos entonces. Ahora, de boquilla, son millones.
Pero Franco murió en la cama.
Delirando fantasmagorías de Magreb y garrote vil y anarquía.
Apretando con toda la saña que da la vejez las nucas de un puñado 
de inconformistas.
Como quien ve un gigante y arremete contra el molino, el molinero 
y su hija, Franco, el muy cabrón, murió enquijotado en la cama.

Y ellos decían escapar del gris. Correr ante el gris.
En pos de una aurora democrática, decían,
que les esperaba con los brazos abiertos cantando John Lenon, Bob Marley 
y tele en tecnicolor.
Pero pronto marchitó el clavel en el fusil portugués.
Pronto, muy pronto, deslució el Sol las nuevas banderas.
Y pronto, demasiado pronto,
el 68 fue arrebatado a la Historia a cambio de un 69 lameculos,
del placer por el placer,
de un evolucionismo monetario que sigue provocando náuseas
y de un individuo que diciendo progresar fue perdiendo los colores.

Porque decían escapar del gris. Correr ante el gris.
Ahora les ves en el sofá.
Catorce pagas, hobby, casa, coche, veraneo, hipoteca.
Con su miradita gris avezada en colores catódicos,
el corazón regado de barbitúrico, la mente bañada en Prozac
y sin saber silbar siquiera.

Decían escapar del gris. Correr ante el gris.
Y el gris les atrapó.






Poema fatuo L

El laurel ni se come, ni cotiza en bolsa, ni alimenta el corazón.


Poema fatuo XLIX

No se castiga tan duramente al pobre que roba un jamón porque roba para comer. Se castiga tan duramente al pobre que roba un jamón porque roba para comer con gusto. Esto último es lo que no soportan los ricos de jamón en bodega.


Poema fatu XLVIII

I volia més perfecció.


Poema fatuo XLVII

No hay rabia más destructiva que la uterina. Es órgano de creación.


Poema fatuo XLVI

Sin estar en absoluto de acuerdo, sí lo estaba completamente.


Poema fatuo XLV

Resistirse al malditismo con todas las fuerzas. No sucumbir a Alfonso Costafreda.


Poema fatuo XLIV (A Bernat Padró)

La ignorancia se combate. El intelectual es soldado o no es.


Poema fatuo XLIII

De esos contados días en la vida que no se empiezan sino que te empiezan ellos a ti.


Poema fatuo XLII - Poema fatu XLII

Que un pueblo no necesita ni de lengua ni de tierra para pervivir como tal me lo demuestran judíos y gitanos con sobrada dignidad. Quien necesita lengua y territorio para pervivir son los grupos de poder y sus leyes, y los grupos financieros y sus esclavos.

Que un poble no necessita ni de llengua ni de terra per perviure com a tal m'ho demostren jueus i gitanos amb sobrada dignitat. Qui necessita llengua i territori per perviure són els grups de poder i les seves lleis, i els grups financers i els seus esclaus.


Poema fatuo XLI

Todos decían amarlo y entre todos lo mataron.


Poema fatuo XL

De tanto mirarse al ombligo le acabó por salir un ojo en la panza.


Poema fatu XXXIX (Dedicat al propvinent 11 de setembre)

El meu és un poble genial com un vell savi però covard com un nen petit, que davant l'adversitat s'imagina monstres i es tapa el cap sota la bandera, com sota un llençol.


Poema fatuo XXXVIII

Desengáñate. El día más importante de tu vida siempre pasa desapercibido.


Poema fatuo XXXVII

Tu habitación, hijo mío, era un campo de tiro repleto de casquillos de beso. Que nos cerraran el parque y nos pusiéramos a barrer tuvo su recompensa inesperada. Ahora sí, otra vez, fuego a discreción.





Sóc català, me cago en Déu

De Gausach a Agullén,
de Sant Guim a Badalona,
aquesta terra m’és ossari,
un panteó, un llarg rosari
genealògic d’existència catalana. 

I pagaria per cantar en turc,
per tenir la sang asteca,
una barreja d’indi y zulú
y un xic de flema anglesa.
Per conèixer tots els rius,
per sentir meves les runes
de tot el que feren, vius,
aquells que ja no velluguen.
I per dir: Terra! Sóc fill teu!
Fill de tota l’esfera!
Que siguin els astres la meva senyera! 

Vinc de negrers, bandolers i mercenaris,
se me’n fot que guanyés el Borbó,
com se li enfotia al meu besavi
quan bufava el vidre fent-se pols el pulmó.
Que us donguin pel cul, burgesots,
la pela serà la pela, però la rauxa és nostre.
Els meus gens es retorcen sota la vostra crosta,
però als meus camins no hi posareu burots.









El tiempo perdido

Si tuviera en mi mesita de noche una hucha segundera
para meter cada mañana los restos soñolientos del reloj,
la rompería ya mismo de un golpe, o de un aliento,
juntaría las migajas derramadas de mi tiempo
y haría con ellas un ratito para contarte el cuento
de esa lechera que no quebró el cántaro,
que cumplió el sueño.
Si de un año tuviese ahorrados los días absurdos,
o, día a día, esas medias horas de espera desabrida,
de minutos sin aliño demasiado cortos para aburrir,
demasiado largos para fingir estar sumido en entreactos.
Si tuviera del banco un extracto de meses sobrantes
o de lustros invertidos en vete a saber tú qué crónicos desfalcos,
te lo daría a ti ahora mismo hijo mío.
Pediría en ventanilla un reintegro en días de reyes y fiestas niñas,
en domingos hermosos y noches pías
para compensarte las sondas, las gasas y las vías
que drenaron la ilusión de un seis de enero,
la de un fin de año sin año nuevo y la de un hogar de amor certero
que merecías y yo perdí, con cara de tonto, el puñal en el cuello
y en mi escaso bolsillo el derecho a pataleo sin usar, casi entero.







Un estribillo

Ni el tiempo lo cura todo,
ni a todo se acostumbra uno.
Ni el dolor. Ni la locura.
Ni la memoria de lo sentido.

ANGÉLICA MURILLO [9133]

$
0
0



Angélica Murillo (1976) nace en San José, Costa Rica. Es Comunicadora Social con énfasis en Periodismo de la Universidad de Costa Rica. Dirigió el Taller Literario Elipsis de la Universidad de Costa Rica (2006-2007) y fue cofundadora del grupo Poiesis (2002) Ha recibido una Mención de Honor en el III Concurso Internacional "La revelación" (España, 2009) y el Premio al Mejor Videopoema en el VIII Concurso Internacional de Poesía Breve "La Vanguardia" (España, 2009) Publica su primer poemario variaciones en torno a la trayectoria de una hormiga (2010)



Suiko-Tenno y Lu Yu frente al Templo Budista 
de Nara a la hora del Té 

"Japón, 606 d.C." 

Dispongo del abrazo para recibirte.
Preparemos
Lu Yu
el agua blanda
para el dragón negro
y el te rojo.
Lejos, el viento esparce por la tierra
lo grande y lo pequeño
la forma y el agua.
El agua que ofrece de su aliento:
La flauta de bambú.
La tinta de Gautama.
Nuestra pequeña tetera
color de arcilla.
El tiempo es propicio
y su vientre
3/4 partes del otoño.
Bebamos
Lu Yu
el dragón negro
y el te rojo.
El silencio es eterno.
Y el instante habla
por nosotros.






Al atardecer en City  Wild

"Caían, uno a uno los caballos"/ Arizona, 1872 d.C. 


1

En la vieja cantina
Forajidos
Jack 
el travieso impúber, el pequeño
le habló con la palma
recién curtida
a la hija de Billy
la triste domadora, la celeste:
--Ayer cumplí doce años... déjame ser tu vaca.
Y la hija de Billy, la triste domadora
la celeste
dejó su whisky
casi al borde
y le dio un balazo en pleno pecho.


2

(Calamity Jane)

Allá
donde la luna es un gorrión
y el árbol amarillo
busca en vano
el centro de la tierra,
no hay nada más profundo 
que el desierto.
Nada 
excepto el pan
tu sangre
y los ojos 
de mi caballo.





Susa I, 5 400 a.c

Sobre sus cabezas el viento
arrastra las hojas secas.

A escondidas, dos hermanos
unen sus labios
como Enki en el estanque.

Pero dos amantes idénticos
huyen siempre de su espejo.

Y por siempre
forman ondas
y unen formas
en el agua.

Suicidas

Sobre sus cabezas el viento
arrastra las hojas secas.






Perdí la cabeza (literalmente)
Buenos Aires,1941

Y aún llega el Androcéfalo a mi noche,con ése 
su linaje síncope de esdrújula conversa.

Yo era, su mascota futurista, su juglar 
sin epopeya.

Cirujano íntimo de sus dragones, mortaja 
siempre, de sus cadáveres ajenos. 

Yo Caballeros, soy miembro sin pena del club 
de contadores. 

Malversado -por más señas- Vivía con prodigios 
de bajo fondo. 

Pero él era demiurgo -también titiritero-
Juntos: la bacteria comecarne de los labios infantiles-

Aquél tipo -de la 3-A la Z- 
se llama Asterión y solo escribe ficciones. 

Pero yo prefiero deciros la verdad: esto 
es una celda.

Puede ser un manicomio, un burdel, una concha 
Ohhh sí una casa. 

Después de un non, de un sinsentido ya no será 
la imago de la muerte –solo en sueños-








Giro a la Izquierda

Tendí mi depre al son de novísimas estrellas
y sin pensarlo
rumbeé dos veces por el mismo bar.

A deshora, todas las puertas están cerradas.

¡Hey camarada!
Otra copa para el zarpe de mi sombra que se va.

Que se ha cansado-dice- de tanto suelo
y de gastarse las medias 
con el propio zapato de Vallejo.

Si mal no recuerdo te mal recuerdo:
Octubre y yo nos entendemos.

Y ya no escucharé ésa tu voz
encinta que paría me debes veintisiete años,

un día de sol y un viaje en autopista,
-por aquello, de que amanezca más temprano-

Porque si no eres en ¿qué te empeñas?
cuando no se es lo que se marcha.

¿Verdad que ya te ibas?
Ya es hora de que te vayas.

Y nos fuimos...
Tendiendo al son de novísimas estrellas.

Y como a un cristo silente nos condujo.

Giro a la izquierda.






Sobre el amor filial –y otras desviaciones-

Dónde está el auto 789 y el hijo cínico, filósofo de buen vestir.
Hace un minuto era un niño y bajaba la pendiente de la mano.

Pero su padre -esquizoide universitario-
le apartó de su mejilla con un gesto
que nada tiene de cortés.

Cortéz al menos era un granuja y su caballo
hacía agujeros negros y uno que otro
ojillo de alfiler.

Con tan hermoso instrumento podríamos jugar.
Yo seré el Marqués -De Sade por supuesto-
Vos, mi fiera predilecta: Lautrémont.

Y desde la cabina
donde inmolan a las putas -por cobrar-
citaremos a tu padre y ya verás...

Le pintaremos con sangre
las uñas de los pies.








Tu melena de Melusina

El mejor de los posibles vegetales carniceros
tu cabellera -blanda y tibia-

La conocí cuando era niña
cuando apenas crecían sus primeros dientes.

Para entonces, solo gustaba del targuá
y de uno que otro conejillo de indias.








Obituario


Al taxidermista de los cuadros por encargo
le han dado muerte las damas de Aviñón.

Era amante de los clones y los virus de Morel.








Bohemia del mal amor


Qué fácil fue tu amor, qué triste
y yo que te decía: no me ames.

Fue la noche en que ya madura
el hambre pastaba en el bulevar.

Camino sí por la avenida
mientras un niño...

–¿Era ayer cuando nacías?

...hace malabares con brazos
y un corazón anciano.







El Contrabajo

Soy el contrabajo de las tristes avenidas.
La enfermedad del sueño en do menor.
El cadáver invisible de los días.
Ya no soy.

La multitud felice del amor.

¡Ay!, la mi desgracia. Mi fa, mi dama,
mi bello sol. Compuso un solo para su gamba.
Y eso es todo.

Murió el amor.






Lírica,1800

Yo quiero ser la pasajera
la semilla oculta de los vientos
y caer del sueño hacia la tierra
como sueña la hoja su regreso.

No quiero.






Delfos, 28 de mayo de 585 a.c

A Josu Landa

Sophia mía, las aves en celo y en el jardín: Bilitis
ha besado el labio donde se posan los versos de Safo.

Amiga mía, del aire que deshace, del agua siempre,
no es preciso hallar camino para huir del tiempo.

Mira en torno la mecánica celeste, el laurel florece
de nuevo, y en la arena, los atletas pitios disputan su corona.

Pero de todos los enigmas que el Oráculo de Apolo le confirió
a esta esclava de Dionisio, ninguno regresará a los muros de Delfos.

He visto sucumbir imperios que no creían en la muerte, he visto
a los amantes del espejo y el doble anillo exigir su sangre.

Pero yo sé que somos con la libertad de las ondas lunares,
con el fuego de los cataclismos hace tiempo sucedidos.

Tales no predice, no dice que la Diosa volverá y el agua
tomará su antigua forma para librarnos de este sueño.

Semejantes a Perséfona, a Atti, a Penélope, en estado de vigilia
iniciemos, el ritual de Tetis y Deméter, la de brazos como espigas.

Dulce es la espera cuando el destino ha empeñado su palabra.
Dejemos, que en la arena, sigan su juego los atletas. Pitonisa.






Tiempo

Más ligeras que la sal
provista del vuelo
de las naves siderales

somos

segundos de un espacio
donde crecen
el árbol, el camino

el viejo

que huye de una ciudad legendaria
y que por esas cosas del azar
vuelve al punto de partida

solo

para descubrir
que no hay parábola posible
cuando

ese puente

que de uno a otro punto
va de la nada alabismo
es un puente

ficticio.

Y son los puentes que nos llaman
una araña que desteje
fragmentos de lo oscuro.

Como el amante solitario

es el puente que cruzamos
el árbol, el camino,
y el viejo que olvida

en la estación

para qué lleva el pan
para quién... si un día
podría cruzar la ciudad

podría volver

a casa
donde la campana de la cena llama...
Abres la puerta y no hay nada.

Nadie

tampoco te esperaba,
lejos, esa luz que ciega avanza
ese puente que

sueña

toros perdidos, odalisca sin alas
y una madre gimiente
por su hijo

que un día

cruzó la calle
cruzó los puentes
los laberintos

cautivo

solo, para comprobar
que el árbol, el camino
y el viejo que huye

no sabe

que de uno a otro punto
está la cena
que le espera

de tan largo viaje.






Crónica de un Absurdo

Hoy, a las 3 de la tarde

La única tarde
en que llegó el amor
a visitar mi casa
no me di por enterada.

Fue una tarde
ya muy tarde
para la tarde
única
en que decidí
—ya tarde—
que era tarde
si de verdad
te amaba.






BERNARDO CORRALES [9134]

$
0
0




Bernardo Corrales (Alajuela, Costa Rica, 1980) Reside en Barrio San José de Alajuela. Sus poemas se han publicado en la revista literaria Fronteras y la Galería Semillas, en La frontera del ocio, Semanario Universidad. Antologado en Lunada Poética. Poesía costarricense actual 2006. Vol II por Armando Rodríguez Ballesteros. También en Sostener la palabra. Poesía contemporánea costarricense por Adriano Corrales, 2007. Participó en el Taller La Merula del Mango del que fue miembro cofundador y  del Taller Libertad bajo palabra. Es miembro del Grupo Cultural Ambiental Resistencia CALUFA  y del Colectivo La Fuente, periódico local. Ha publicado el libro De tinta el altavoz (poesía, 2008)





28

Déle faroles a la niebla
que las pupilas te piquen el sueño
bengala de vértigo aglutinada en el bolsillo sin coser
habitación de moho al animal ponzoñoso
para que bese la nuca

coja posición de derrota persígnese en alcohol
golpee el reloj hasta que se trague el minutero
par de monedas de desprecio al mendigo que habita
pone el abrigo con paranoia y saluda el silbido de las
navajas

Róbese la bicicleta del niño vendedor de sobros
pedaleé los aguacates
los ajos
su suerte ambulante
después pregone:

Se los pago después

Después nunca regresas

Déle a la calle ella también llora y sangra con pasión
déle a la piñata hasta el palidazo
ella también te desea muerto de frío
arrollándole sus pechos con delicadeza
descarapela el bolígrafo con el solsticio de la abuela
en el punto exactísimo del aguadulce reverberando
en los anaqueles de tinta
y podremos hablar de poesía callejera






9

Recibamos la náusea
quitémonos las vísceras saludemos
pongamos a caminar esta ciudad trasnochada
sobre su tumulto de cadáveres blancos y sobrenombres

Que salga con la solapa ajada el triste gato verde sin
encías
corona de merula el sostén de mangos

Recojamos el cenicero para el nuevo desbordarlo
firmémosle nuevamente nuestro nombre
abracémonos como siempre enemigos
con la boca repleta de moscas

Qué hierva un poco más la esquina
ahí donde nos devoramos la que puede ser
la última noche en una bocanada de espasmo

Recibamos la náusea con el canto del gallo
con sudor y cráneo abierto
con el abrigo tildado



Acto III

Sálvanos telmárquetin en ti confío
todo lo puedo en top model que me fortalece

Ven a nosotros padre del neón
gran padre del celuloide
con tus manos de plasma abrázanos
que tú eres el camino la verdad y la vida
según proclaman tus cúpulas satelitales
madre de las funciones industriales y financieras

JESUCRISTO SUPER ESLOGAN
en las frecuencias radiales

Nos arrodillamos echamos andar en tu nombre
ombligo de firma y estiércol

Protégenos de las estridencias Top fashion







Ecosaurios  goriletis

regresan donde nunca se marcharon
tarde de ladridos represivos vibraron en los semáforos
pasan factura  garrote  circo

emigrante de la casa desaparecida
en pradera de cemento muerto y rematado en fotografías
ecosaurios cibernetizados corren por las nuevas venas
corroen

elefantes tigres osos focas globales
emputecidos para nueva porno

amigo adicto a los delirios embolsados
envuelto para navidad
muere dormido
oda al consumismo

masturbaciones con tarjetas infinitogold
numero repetido en el psicocircus
ciclo de versiones oficiales desde el espacio
satélites del gran triunfo entretienen mi infancia en occidente
asesinan en oriente
dan vuelta las magníficas redes ondas y señales
a su macro economía me encomiendo
donde mis amigos muertos fueron y
serán bellos
su sangre clavada en las aceras con alta definición no huele mal
más bellos los nombro
goriletis ecosarios regresan de donde nunca los fueron
porque el confort nos basta y nos sorda







Poema Bomba 
al estilo Puente Bailey

Del cielo caen y ponen puentes bailey
hasta en los comedores escolares
donde ni con grúa llega la comida
las calles se agujeran
se inundan las avenidas
mientras noticieros con un bombo llaman al terremoto de Nicoya
rechinan por la pantalla el cuento de la platina

todos todos al ritmo de chilindrín virtual
a comentar la foto de la mamá
del perrito
la arruga del escroto del gamonal

jugando ronda ronda a firmar alianzas de tamal

todos de las manos a brincar para ver al sacerdote todo calladote 
en su catedral con su hija predilecta rezando apretando la panocha
por que le bendigan la trocha

bomba este pueblo es alfombra

A profesionales de la chota y el chisme les meten cada cuatro años 
los guevos del Chirriche
yo compongo esta pornocanción para el vacilón en el chinamo 
seudo cawboy

En diciembre le tapan los ojos a Cristo para sacar negritos cantando 
villancicos con bufandas tejidas de lana en el Caribe

sexo poxilina y molotov
sueños mojados del sillón
echarle monedas al niño dios en su portal

Ya viene los regalos y el alcohol
con miraguanos desfasados coqueros bien pagados catedráticos 
acomodados en su confort

que me importa que caigan las grúas tristes
ya vienen los topes donde los pobres toman cerveza agachan la cabeza 
a la oligarquía disfrazados con botas y sombreros de vaqueros rentistas
banqueros que alquilan caballos para montar a niñas nalgudas

Las fiesta de palmares los conciertos imperial donde la seudo izquierda 
va a saludar a calle trece

vísperas de más huecos y huecazos

Bomba

tartamudos poetas que no pueden salirse de la capital


vísperas de año nuevo carne asada
llorando la payasada de la cuenta regresiva

vamos a la playita vamos a la ronda ronda del buen tico
a ver al gringo chupar chupar niñas en mega hoteles

vamos chupa medias fiesteros olvidadizos
al advenimiento de otra cogida a nivel nacional
que al culo suave no le ponen saliva
la única sangre que se aviva es para cantar goles de domingo
y ver las puticas o travestidos de periódicos sensacionalistas 
que chorrean idioteces y doble moral

a votar por un tamal,

sapear opinar la vida ajena en la telegúia 
que dicta sodomía de la marca de moda
talismán para mi alma caldo de pollo
tierra blanca pacífica y protegida de diablos y hechiceros
donde somos topadores choriceros que nos deslumbramos 
por un nuevo celular

sin puente que me conecte dignidad con rabia ni inteligencia o maña
lo dejo para mañana como es habitual
ya vendrán los que critiquen este poema bomba noticia de esta patria 
que no es nada igual esta rima mal servida no durará tres días 
en la conciencia popular




CAMILO RETANA [9135]

$
0
0

Camilo Retana. Nació en San José en 1983. Realizó estudios en filosofía en la Universidad de Costa Rica, donde labora como docente desde el 2007. En ese mismo año se publicó su primer libro, ¨Mala estirpe¨, con Ediciones Perro Azul. Ha sido incluido en las antologías ¨Lunadas poéticas¨ (2006) y ¨Sostener la palabra¨ (2007) y varios de sus poemas han aparecido en revistas y suplementos literarios. Su texto ¨Pornografía: la tiranía de la mirada¨ está en proceso de edición para su publicación con Ediciones Arlekín.




Papá,
maldito
me hubiera gustado que te callaras a tiempo
que verano y noche
no estuvieran jamás en tus poemas

Ay Papá
vieras como aborrezco perdonarte
desmentirte
retomarte

Nada de lo que hay en este cielo es tuyo
lo perdiste por volverte loco
por volvernos locos
por marcharte a tiempo







Dejar las cosas
sobre los muebles de la sala

Ir hasta el cuarto
como quien desfila
hacia el abismo

No hay nadie

y ahora sí,
despacito
llorar hasta el cansancio







Es grande y grueso
como un viejo oso

Fue mi padre

Y tiene miedo
de que hablemos
de la muerte






SER EL HUMO QUE TOCÁS

Ser el humo que tocás
el violento humo que tocás

Comprar a plazos
un poco de alegría

No ser ya más ese humano sangrante
que calla
se angustia

Volver atrás donde nada te espera





Tomo el bus

allí conjuro
los intentos fallidos
de derrumbarme

Imagino
que esperás en el sillón,
vos también
con todas las batallas perdidas

dándole cuerda al mundo
haciéndote la sola






Pongo silencio
en las heridas
como si de verdad creyera
que a la soledad
hay algo que la borre

Cierro las ventanas,
guardo bajo llave
el recuerdo
casi triste
de mi hermana

Afuera
alguien toca la puerta
pero no abro

Es que hace mucho tiempo ya
que no estoy esperando a nadie



CAMILO RODRÍGUEZ CHAVERRI [9136]

$
0
0


Camilo Rodríguez Chaverri, COSTA RICA
La obra de Camilo Rodríguez Chaverri es enjundiosa, una obra poética sólida que inicia en 1993 con Sueños en vuelo. Camilo es quizás el máximo representante de lo que en el 2001 se empezó a definir como "Poesía Urbana". Su origen se puede rastrear en Gonzalo Rojas, Enrique Lihn, Juan Gelman, Mario Bennedetti, Jaime Sabines, Nicanor Parra, Pedro Shimose, José Coronel Urtecho, Carlos María Gutiérrez y otros. Una poesía que pretende una comunicación directa e incisiva con el lector, con cualquier lector, utiliza un lenguaje claro, con frecuencia coloquial, a fin de representar las inquietudes compartidas por la mayoría. De allí, se sobreentiende que se desprecian las indagaciones individualistas, los lenguajes herméticos o mistéricos. Predomina entonces un sentimiento solidario con los desheredados y excluidos, una relación crítica e inmediata con la actualidad circundante, una inquietud existencial preocupada por la alienación, la violencia y la injusticia. La obra de Camilo recoge todos estos elementos como se puede ver en el libro Otras postales de la patria (2005), quizás uno de los más acabados en su abundante obra poética, en la que falta agregar Montañas rebeldes (1994) Simio urbanita (1995) Amor de barro (1996) En este jardín vivo (1997) ¿Por qué te fuiste, Capitana? (1998) La sirena y el pájaro ciego (2001) Luces del alba (2005) Cartas de navegación (2005)
El libro se inicia con un poema de carácter cinematográfico a la manera Martin Scorcese o Luchino Visconti. El epígrafe de Benedetti "Nadie puede / contemplarse dos veces / en tus ojos." implica una lectura que busca la empatía con el lector y la denuncia de la realidad sucia y prostituida. El hablante nos conduce como un lazarillo para con observemos con un único ojo aquello que jamás se volverá a repetir:





Voy por la calle 12 de la capital de mi país.
Aquí le llamamos la zona roja.
Hay gente tirada en las calles, en los caños.
He visto aquí personas con barba de muchos días
y enaguas rotas,
elegantes a pesar de la ocasión,
mujeres con una chinga de cigarro
como para que la mano y la boca no pierdan c0ntacto,
niños olvidados por el destino.
Es mediodía. Es feriado.
Todos salen de sus cuevas,
buscan un trago o un puro
para recobrar el espíritu de la noche.
De un cuartucho con una puerta
sale una muchacha.
Se puso el mejor vestido para el día.
Se ve muy vieja para su edad,
pero hace su mejor esfuerzo.
Hau una pareja sentada en una acera.
Ella levanta la mano.
Ellos le devuelven el saludo.
Sonríe.
Me quedo con su sonrisa
cuando el semáforo en verde
me invita a pasar...






poema 32

Ella no quiso nada más con él. Le había pegado, la
golpeó muchas veces contra la cama,contra la pila,
contra la cocina. Ella aguantó mucho, pero cuando él
golpeó a sus tres hijas, ya no pudo más.
Le dijo que se fuera, y se fue. A ella le extraño su
silencio y obediencia.
A los días, cuando ella estaba en el trabajo y sus
chiquillas en el colegio, volvió, abrió la casa, la roció
con gasolina y le prendió fuego.
Las dejó con lo que andaban puesto.



DEL POEMARIO: ¿Por qué te fuiste, Capitana? 


Uno

Las otras pieles
                        Son una zona sin conquista ni colonia
Que podría recorrer como turista
                      O como agente viajero
Que podría celebrar como lo hacen
                     Los hombres del mar en cada puerto
Pero nunca serán la tierra de poeta.

Es tu piel la  guarida y la religión
                                                   Que me interesa
El lugar sin límites y la única cárcel
                                                  Que persigo por cuenta propia
La verdadera cadena perpetua de la que
                                               Quiero ser culpable y cómplice.







Cinco

Una luz grande abre un paso
Entre tu camino y el mio,
La crea este infinito afán por conocerte,
Este incansable deseo de buscar
                                              El tesoro perdido en tu vientre,
  Y ese reclamo
Con el que naciste en la mirada.






Siete

Un animal de tierra firme
Busca el abrigo de una piel
Que es buscar un sitio estable
Para hacerle un nido a las grandes historias
                    Con las que los obligaron a nacer

Debían aparearse sus clamores
Bajo el auxilio sereno de una mujer desnuda
Pero se haya perdido
                    En un isla solitaria







Nueve 

Tu boca 
Enciende el fogón
E  invita a iniciar
El  incendio sabroso
De  nuestros cuerpos







Trece

Cuando los unicornios existían
Y las sirenas copulaban en la orilla
Y la patria era más grande que un bocado

Cuando este mar se abrazaba más sonriente que solemne
Aunque los hechos  fueran nostalgias recurrentes

Otro gallo cantaba en este patio y en el patio vecino,
Pero, entonces, te fuiste
Y ya las hadas se declararon en huelga
Y el mundo en serio se fue al carajo.









Veinte

Una piedra en el pecho oprime,
De la frente baja un hilo de sudor frio,
Las rodillas fallan,
Un aguijonazo va del cuello a las manos,
El puño se cierra y los dientes
             Se desatan unos contra los otros,
Los ojos son un resumen del asombro
Y la piel quisiera salir corriendo
Luego todo regresa a su sitio,
Solo mi sorpresa se ha ido en tu mirada.



JOAN BERNAL BRENES [9137]

$
0
0



Joan Bernal Brenes (San José, 1974) Estudia en la Escuela República de Haití, en el Liceo de Costa Rica y en el Liceo Rodrigo Facio. Continúa en la Universidad de Costa Rica con la carrera de Filología. Perteneció al taller literario del "Café cultural Francisco Zúñiga Díaz". De él se ha dicho: Su poesía presenta un verso arrollador, inyectado de juventud y deseo y a la par, lo barniza de su experiencia, de su interiorización del mundo. Joan Bernal Brenes ha publicado dos libros de poesía Pre-monición (1996) y Homenaje a la ceniza (2006)

En en un mundo de sobreofertas poéticas y una demanda fragmentada de lectores, la obra de Joan Bernal Brenes es quizá una de las más brillantes en su intento por definir la realidad del ser costarricense y la individualidad del ser poético. En su verso se pueden hallar reminiscencias de una multitud de autores, lecturas asimiladas inteligentemente, para dar un producto nuevo y claro. La realidad que retrata con precisión de orfebre Joan Bernal es el barrio, la plaza, el pueblo, la ciudad, desde un yo insoslayable. La experiencia poética no es trascendental, sino contigente: mi ser es mi circunstancia. Desde su primer libro, el poeta nos señala el origen desde donde nos habla con voz de templo y hacia donde va dirigida su voz. Un poema paradigmático de la misión del poeta es:


Tintero y mano

La noche es una estopa empapada en bocacalles.
Alfredo Trejos

Tintero y mano respetan
la gravedad el caso
de dejarse cerca
sin timidez o duda 
ella se encorva
a sentirse él
se siente a encorvarse
repetidamente
ninguno calla
ellos son 
existen tardíos o tempranos
dice él: son cosas
ella: afinidades
tintero y mano
sospechan cómo saber encontrarse.
Su solo corazón
bombea 
sangre sin tiempo
y sangre
afinada por mi sangre
Tribulados 
por no poco sentimiento
tintero y mano
sacuden la tarde
a un costado
-en el centro-
son siempre elementales.
Necesariamente nuestros
tintero y mano saben
reabrir su corazón por divisarse
Cuando escribe
mi ser
es reprochable 
porque mayor 
es el transcurso
de ellos ante todo
simple tintero
y simple mano: 
reto coraje.



En este poema, los signos del tintero y la mano se transforman en personajes de un discurso poético, que recrea una escena amorosa. ¿Qué es ser escribiente o escribidor? sino un acto de amor que busca salir de un centro cósmico como un torrente de palabras. La antropomorfización de los objetos como recurso para expresar el deseo de comunicación sirve de excusa, para crear uno de los poemas más logrados de la lírica costarricense. El acto poético es un desafío que solo puede ser superado con decisión, ánimo y esfuerzo por lograr el poema. No es de extrañar, que Joan Bernal en su segundo libro Homenaje a la ceniza haya pulido su oficio, dándonos quizás los mejores poemas que se hayan escrito en la primera década del siglo XXI. El libro formado por cinco partes es un buen ejemplo del oficio de un escritor que ha crecido en en los arrabales de la ciudad. Homenaje a la ceniza es un libro magnífico en que Joan Bernal Brenes saca a relucir un estilo prístino y preciso. Como en este poema dedicado a José Lezama Lima:




Tenías que vivir en Trocadero
trocar es verbo tuyo
trocar es un gran verbo
no es gratis que tu obra
fuera de una gran tamaño
o que honraras tu bebida
y cenizaras mucho
que tú nunca descuidaste
componer en perorata
para hablar como el insecto
que se baña en cada hoja
que el azar no fue tu asma
ni tu única familia
que orquestaras en tu pecho
el silencio más notable
que hayas nacido viejo
que hayas vivido en Cuba
don José. Todo está claro.


La obra de Joan Bernal Brenes es síntesis de un manejo refinado del lenguaje, del esfuerzo y la valentía para construir un estilo personal. Una poesía innovadora como ocurre en la quinta parte de su segundo poemario "Diccionario auxiliar de desencanto", en la que de una manera elegante satiriza el medio poético y social costarricense. Espéremos pronto una nueva obra de este gran poeta costarricense, quien desde sus circunstacias asume el reto poético con denodado coraje.








EN TI10:15 pm

A : los que nunca han besado

Besándote de labios más adentro
afuera nada hay mas que lo tuyo
conspiración con nadie tu figura
diamante simulado de diamante
poséote la savia adolescente
conmigo nada soy si no te puedo
y tú si no me puedes me conjuras
al suelo a la verdad a la memoria
me besas con un beso irrepetible
mortal condena tú si no me besas
con la saliva – miel que hay en la carne
Los besos sucedieron son lo besos
la viva cicatriz la irreparable
perversa latitud dulce y centrífugo
el beso tiene luz tiene la cima
del beso donde existen dos besándose



UN MÁS ALLÁ... OTRO 


Qué nueva muerte amaneció en tu sangre. Se nos cae el pelo la mirada. La lluvia está – de puertas y de ojos- repetida. Pero estamos dentro de esta pequeña muerte. Que circula a tientas nuestro mundo. Y un término invisible escapa a nuestro cuerpo. Quien creara esta extrañeza. Es como un tiro. Porque el temor en mí es más terreno que el mismo aliento de los parques. Y en ti la mansedumbre es sufrimiento. La súplica que afila su simiente.

Vamos a transcender nuestros latidos. Vamos a encontrarnos más adentro de esta oscura noción de vacilantes. Y bajemos vivos a lo vivo. Qué puede desafiar nuestro infinito. Desafiará a la tumba y su molestia. Como un tosco envejecido viento que ensordece ante mi amparo. La tristeza se hace gobernable. Podemos no estar cerca. Lo distante pasó a ser entre todos los refugios. Y ocurrió que el tiempo fue esa puerta innumerable y fija hacia nosotros. El amor que vemos ya esta hecho.

Esta enfermedad nació en el llanto. Y vino francamente a contenernos. Hasta las campañas desconocen cuanta mordedura es su rareza. Y se aviva. Húmeda. Terrestre. Como un buen puñal: embrutecido. Hasta que no empiece la caída.

Sentarnos a morir sin nada puesto. 

http://los7ahorcados.blogspot.com.es/



A : GINA 

No me dejes Señor sin estos ojos
convídame estos ojos y no me debes nada
no sé si es imprudente
quererla asi con tanto
ella no piensa igual que las que yo conozco
ella no viste igual
que todas las que viven
ella se vuelve un único contento
y una alarma
me tiene caminando de un hilo por el mundo
y hacía mucho tiempo
que no sentía un celo
pero su sentimiento tiene de claro y bueno
la libertad que arruina
mi tumba y mis querellas
no me dejes Señor sin estos ojos
yo te mendigo verla
te ofrezco mis sentidos
te ofrezco a ti una misa en lo alto de la calle
con este remolino de niñas entusiastas
pero no tengo mucho
te ofrezco mi cabeza
tocarle las dos manos
y confesarle un sueño
mi súplica consiste en una cara larga
y unos zapatos nuevos
que aguardan mi salida
el día de mañana te pediré de nuevo
acuérdate: sus ojos
y aun me debes algo.







Agua que avanza por un río estrecho
yo bebo un vaso de agua

Andar por el desierto
siguiendo un espejismo
cuestión de vida o muerte

Yo bebo un vaso de agua

Yo soy como el sediento
que apenas si respiro

Tentado por la muerte
yo bebo un vaso de agua

En ciertos territorios
se sacia
a los espíritus

Con agua de las fuentes
yo bebo un vaso de agua

En otros se consagra
en parte por los íncubos
a proteger la carne

Yo bebo un vaso de agua

Yo creo firmemente
en el poder del Ganges
para curar la lepra

Yo bebo un vaso de agua

No se equivoca el hombre
que en ella vio la vida
y la buscó en la luna
yo bebo un vaso de agua

Sentado en una piedra
siguiendo en la corriente
la ruta que vio Heráclito
yo bebo un vaso de agua








A cuàntas leguas de viaje terrestre
o submarino
estarán los ojos de la mujer que ame
hechos con la misma piel
de sus dos hombros
mirando a un continente
que tal vez no existe
con cuántas municiones
mujeres y canastas
hombres y cadenas
emprenderé ese viaje
buscando el mismo norte
que no habrá variado
y como el continente
que tal vez no existe

Porque es cierto muy cierto
que la mujer que ame
será como se dice
que pasó en América
a donde algún misterio
me traigan las corrientes
todo lleno de piratas
y de catalejos
la única variante
será para mí mismo
ella solamente
amablemente ella
que no será los mismos
territorios vírgenes
ni los mismos dioses
ni sus templos
será como es debido
una mujer distinta
rodeada de rompientes
o de acantilados
con buenas ensenadas
en donde el agua humilde
muestre transparencia
a muy simple vista
ella con zapatos
y ella con diadema
con datos personales
como sangre
o risa
ella ensimismada
en natural locura
(ella que me rima
con la palabra bella)
y sin embargo humana
es decir distinta
expuesta a sus humores
y a sus jugos gástricos
a su fraudulenta
condición de ella
recta en su contraste
a condición de él
ella que en sus años
habrá amado a muchos hombres
y se habrá besado
con lo porvenir
y habrá soñado en verme
llegar como se sueña
con la frente llena
de todo el sudor
triste a la distancia
que se ve en los sueños
como una autopista
o una claridad
en este punto ambos
habremos ya vivido
la incesante espera
de sabernos dos
nos habremos dicho
digamos con señales
cosas verdaderas
de la soledad
rasgos y matices
de lo que nos pasa
viviendo cada uno
como uno solo
y ya










LA S

A: La S

Saprissa es un bien necesario
Un directivo 

La S protectora. No la SS
La S de Superman
a luchar por la justicia
del buen toque
espacio corto
todavía prevalece en el color morado
color de algo más serio
color de comunión
con una sola letra
hicimos un idioma
con ella nos decimos
palabras de hermandad
de bronca de apatía
orgullo decaimiento
valor y apostolado
victoria o compasión
palabras de una letra
para seguir la fiesta
con una sola letra
retar o seducir
probar en otras bocas
el dolor de haber ganado
defender una bandera
preferir un color







To: That girl from Iowa

Hay un cuarto con cortinas floreadas.
Hay un olor a desinfectante
que me recuerda una cabina
cerca de la playa.
Lo hago con una muchacha
de los Estados Unidos.
Hay una luz de sol de tarde de verano.
Son como las cuatro.
El clima es agradable.
Es una habitacion sencilla
agradable.
Estamos en un tercer piso
Alrededor hay ventanas de bodega
y oficinas.
Fue idea mia venir aquí.
Los dos estamos sudando.
Para mi es una increible pieza de caza.
Veo el azul de sus ojos
y el águila del escudo de su país.
Veo su estatura
y veo la cara de su presidente de turno
empecinado en mandar soldados
a lo que era la antigua Mesopotamia
Ella tiene cara de republicana
y con el aura que da la luz del sol
a esa hora
veo una silla vacia en un mall en Iowa
la veo con un suéter de su universidad
mascando chicle
y un viento de libertad moviéndole el pelo
No creo que me ame.
Seré el hot latin lover en sus fantasias
seré una suerte de antípoda lampiño
hay un poco de jadeo
sin palabras
hay un sweet heart que me guardo para mí
dejo que mis manos
le prodiguen bendiciones
dejo que su olor a made in USA
me invada
(sé lo que estoy diciendo)
me toca y oigo summertime
oigo knocking at heaven’s door
en los amplificadores de las tiendas de abajo
le digo sin palabras:
dios bendiga tu expedicion
dios bendiga nuestro encuentro
nuestras historias distintas
seamos buenos ciudadanos
en nuestras caricias y besos
seamos buenos patriotas
en la entrega y el gozo
trae a este cuarto de hotel josefino
alguna nota de sax del New Orleans Bohemio
estas ganas son nuestra nacionalidad
estas manos unidas frente a la green card
se frotan
será la democracia de dos cuerpos
que tiemblan
la fraternidad de dos caras que rien
Hello I just said
my name is Joan.



JOSÉ RAMÓN OTERO ROKO [9138]

$
0
0



José Ramón Otero Roko (Madrid, 1974) ha publicado el libro de poesía Por el arcén (Ediciones Libros de Letras, 1998). Ha sido editor de ese mismo sello y ha desempeñado diferentes tareas como activista y trabajador de la cultura. En la actualidad, colabora puntualmente con el semanario Cambio 16, el periódico de actualidad crítica Diagonal y diversas publicaciones en el campo de la crítica cinematográfica. La escritura del libro, La falta de lectura (DVD Ediciones, 2011).






PESO DE UN NIÑO 

Qué callar no es sino 
Silencio que quiso decirse 
En ortografías duras como tierras 
Arcillas secos barros con agujero 
Máscaras donde falta la palabra 
Y quién la nombra hasta borrarse 




La falta de lectura (DVD Ediciones, 2011)




TARDE POR FIN 

cae la tarde y entrever 
la propia letra o 
el resto de este sol 
que amanece de otro lado 
no aparece 
que me exista, opción. Siquiera 
una. Depuesto, ha caído el día 
en media luz, 
hasta las propias rodillas 
y nos oculta. Perece, 
ya casi, todas las horas, 
al ser mirado 
hasta haber sido. Me 
aparto. Ni el día 
roto, 
ni uno, ni ella, 
nos hemos vuelto. No fuimos. 
su amado, su amarte. Más 
restó el tiempo; por fin: 
Devuelvo vida, 
dice, 
de ella, 
de ti viajé. 








ESQUINA 

Más allá de la inmortalidad. Es a la muerte 
en lo que el hombre desea, y nacer de nuevo. 
Ser siempre él mismo es un propósito, aún 
un objeto al que asir con los brazos, pero 
no: Arde. Y resume en llamas y nombras 
las marcas, que de acogerte, narrarás con 
tu piel vestida ya tus párpados cerrados. 
Es nadar el deseo. 
De la nada hacer de ella. 
De mi vida y ni muerte eternas tus huecos. 
Nadie se concibe en nacer 
en lo que nace 
a la distancia en las manos. Y de la mano 
habríamos de tener hoy para ser lo 
qué quisiéramos mañana. O ayer sí mismo 
pero un ahora después, saber que nos hemos 
vuelto a vosotros que fuimos algún lado. No es 
a la inmortalidad como a la esencia. Lo 
qué perseguimos 
sino su rotar de cualquier forma, deparar la quietud 
que detentó una verdad para cada una de las vida. A 
sí, no como fin, sino como constante en tú, principio. 








(ASALTAR NINGUNA MURALLA PARA TOMAR LA LIBERTAD)

la vida lo ha dejado todo en mi ausencia
me lo ha tendido todo en el espacio que he dejado
sin comprensión ninguna, en su justo término
en el lugar del vacío:

-qué quedamente, como gira del mundo, ruedas.

la muerte te lo ha cerrado todo te lo has cerrado
para establecer un sitio, proteger una muralla
rodear hacia fuera cualquier palabra otra
decidir qué hablas qué no sabes qué lenguas:

-qué permaneces del mundo, a qué centro inmóvil.

te has presenciado el presente y el futuro
nada vacío trajo una sola vuelta de ella
para su cara y se detuvo en dos vida
aquella muerte que plasme y que sangre:

-como todo a nuestra contra, hacia qué dentro.







DESEO DEL LECTOR

/ las manos
poseen
a la distancia
de las palabras /







DOMA DE LA LECTURA

Aún gritar de caballos
de esta distancia girando
a círculos en hastío de potros
al decir queda de naturaleza
sobre naturaleza y por todo
dominio
las marcas no eran en silla o espuelas,
sino cortes, sutures,
cicatrices todos los rastros del vuelo
roto en su caída de alas a las bestias.








JERYES SAMAWI [9139]

$
0
0



Jeryes Samawi
Jordania

Nacido en Amman de Jordania. Poeta, escritor e interlocutor. Emigró a Estados Unidos, en una etapa muy temprana de su vida, donde pasó un cierto tiempo; después volvió a su pueblo natal (Fuheis).
Su padre era un poeta popular que tocaba el rababah —un instrumento de música tradicional propio de los juglares o poetas ambulantes— mientras que su madre era maestra. Ambos influyeron mucho en su poesía y esto se refleja a través de la dedicatoria de su antología.
Cursó sus primeros estudios en la Escuela de los católicos latinos. Estudió literatura inglesa, filosofía y comunicación; además de otras asignaturas relacionadas con la música, artes plásticas en Nueva York y Jordania.
Miembro de la Junta de Escritores Jordanos y la Unión de los Escritores Árabes, de comités culturales y artísticos del mundo árabe, y de asociaciones benéficas, humanitarias, artísticas y musicales. Participó en varios festivales y acontecimientos poéticos y literarios en Jordania y en todo el mundo.
Presentador y autor de diferentes programas culturales en la Televisión jordana, lo cual lo convirtió en una figura pública en Jordania y en otros países árabes; además fue narrador de varios documentales y participó en la radio de Monte Carlo.
Trabajó como director general del Festival de Artes y Cultura de Gerasa (2001-2006), el cual convierte a la ciudad greco-romana de Gerasa en el escenario principal de uno de los festivales más prestigiosos del mundo árabe. 
Samawi ocupó el puesto del Viceministro de Cultura en Jordania del 2006 al 2011. Fue ministro de Cultura de Jordania en 2011, cargo del cual se dimitió más tarde.
Ha publicado en periódicos y revistas jordanas y árabes. Algunos de sus poemas fueron traducidos al italiano, francés, inglés y romano. Reunió sus poemas en una antología titulada Otro desliz de la Sabiduría (Editorial de la Institución Árabe para Estudios y Publicaciones y su segunda edición en La Casa Egipcia del Libro en El Cairo).
Sobre su poesía se hicieron varios estudios académicos; además de ser comentada por numerosos críticos del mundo árabe. Mientras que en el campo de la traducción y la prensa escrita, tradujo y publicó poemas de poetas americanos, de origen árabe, a quienes llamó los nuevos poetas del Mahger.
En una de sus entrevistas, comentó sobre su poesía lo siguiente: “en un momento dado arrojo la luz sobre el cuerpo del poema para develar al lector el camino del texto y guiarle por sus sendas sin quitarle el placer de la aventura y la búsqueda del saber dentro del poema”. Se considera hijo de un grupo de culturas comunes 
que se mezclaron en su país. Es hijo del cristianismo oriental y católico al mismo tiempo en un país que fue testigo del nacimiento y el bautismo de Cristo; de la cultura islámica que influyó en la formación de su conciencia a través de su interés por los textos de los primeros místicos y la recitación coránica; y de la cultura comunista debido a que su padre fue un activo sindicalista.




Palabras

Pasa por las palabras y elige
palabras suaves como nubes,
pasa, 
detente en mi manantial
como el sueño de una paloma silvestre, 
purifícate con la delicadez de la fragancia
reza a la sombra de mi alma,
colma con agua
mis campanas y secretos.
El poema en tus manos
una mariposa
que escapa del gesto 
de la tinta
y me quedo en tu presencia
analfabeto 
que bambolea, con la mirada fija
al principio de la línea.
Descubre tu ala y sígueme 
en el horizonte oculto tras una nube,
descubre y atrae todas las abejas del mito
a su universo habitado por la magia 
tuyo es lo que quedó del vino del alma,
la revelación de sus jarras rociadas
tuya es la cueva de mis sueños
donde habitaba la gacela del letargo
tuya es en el amor mi primera manzana
una virgen lacrimosa 
como el pecado de la poesía.







Una rosa

Con arrogancia una rosa 
llevó en sus manos 
tocando sus pétalos sedientos
con las puntas de sus dedos
con sus pupilas a mí se dirigió 
y por un instante
elevó hacia los labios su rosa
la estrechó 
y se preguntaron mis ojos
¡quién de las dos la otra inhala
y a ella la acerca!


http://www.festivaldepoesiacr.com/



ADAM FATHI [9140]

$
0
0




Adam Fathi
(Túnez, 1957)

Poeta, escritor, periodista, traductor e intérprete.  Su verdadero nombre es Fathi Guesmi. 

Ejerció la enseñanza, pero fue separado de su puesto hasta 1987; prefirió no ejercer más a mitad de los años noventa, para dedicarse totalmente a la producción literaria y al periodismo.

Empezó a publicar y a leer poemas en los ámbitos universitarios y sindicales, en diferentes regiones del país desde los principios de los años ochenta.
 Su poesía es comprometida y reúne aventuras estéticas y posiciones humanas progresistas.

Ha escrito en periódicos tunecinos y de otros países árabes.  Preparó y presentó varios programas culturales para la radio y la televisión hasta el 2008, y ha escrito varios guiones de películas.

Miembro de diversos jurados poéticos. Ha sido invitado a muchos encuentros internacionales, árabes y europeos, para leer sus poemas o ponencias.

Sus poemas han sido interpretados por varios cantantes tunecinos y árabes; además de haber sido traducidos al francés, inglés y español. Ha publicado un total de 15 libros entre poemarios y traducciones, tres de ellos fueron retirados de la venta y a otros dos se les prohibió su publicación.

En poesía encontramos los siguientes títulos: Siete lunas para la guardiana de la fortaleza (1982); Historia verde y el príncipe Adouane (1984) y Canto del sindicalista elocuente (1986), censurados después de su publicación; El libro de elegías y maldiciones (1989), prohibido por la censura; Cantos para la flor de estiércol (1991); Poema de Jerusalén en la palma de la mano de Bagdad, tres poemas colgados en el muro de la noche (1994), censurado después de su publicación; Poemas de amor y libertad (2000), prohibido por la censura; y por último, El soplador ciego de cristal (2011).

Entre los premios que ha recibido destacan el premio de la creación afro-europeo (dos sesiones: 1987 y 1990); Gran Premio del festival de la canción tunecina (tres sesiones: 1993, 1995 y 1997); premio del Festival de radio y televisión de El Cairo (tres sesiones: 2000, 2001 y 2006), y el premio de poesía en el Festival Internacional de la canción de El Cairo (2002).

Asimismo, tradujo del francés Memorias de Charles Baudelaire (1999); Avicena o el camino a Ispahán (2000) de Gilbert Sinoué; Adiós Babilonia (2001) de Naïm Kattan; Todas las aguas tienen el color del crepúsculo (2003) de Emil Cioran; Ferida (2006) de Naïm Kattan; La plancha azul (2008) e Historia y utopía (2009), ambos de Emil Cioran. 




El soplador de cristal

La niña pregunta a su padre: ¿cómo escribes?
Era ciego. Yo miro en mi interior, dice, hasta ver agujeros
en el papel. Pongo una palabra en cada agujero, 
luego como un soplador de cristal ciego, 
soplo en la palabra para que crezca un poco, así
consigo
a veces
un poema
¿Y qué más? Pregunta la niña.
Nada más, hijita
nada que valga la pena
excepto que 
yo pueda caer en el agujero
y no regresar nunca más.



ASHJAN M. HENDI [9141]

$
0
0



Ashjan M. Hendi
Arabia Saudita

Ashjan M. H. Hendi, Arabia Saudita. Trabaja como asistente de profesor de literatura árabe en la Facultad de Arte y Humanidades de la Universidad King Abdul-Aziz, ubicada en Jeddah, Arabia Saudita. Posee un doctorado (PhD) en Literatura moderna árabe de la Escuela de Estudios Orientales y Africanos (S.O.A.S, por sus siglas en inglés) que pertenece a la Universidad de Londres. 
Escribe poesía y ensayo. Ha ganado numerosos premios de poesía del Instituto Árabe; además, ha formado parte de varias conferencias en el mundo árabe y fuera de este. Parte de su poesía ha sido traducida al inglés, francés y alemán. Ha publicado tres poemarios en 1998, 2004 (segunda edición), 2006 y 2010, además de su libro de crítica literaria Tawzif al-Turath fi al-Shir al-Saudi al-Muasir publicado en 1996.
Su obra ensayística es publicada en varios periódicos y revistas. Su poesía ha sido abordada por la crítica y publicada en sitios web, así como en revistas y periódicos, tanto del mundo árabe como en el extranjero.



LIBRO  Antología poética



Hasta la embriaguez

No ames hasta la embriaguez
esta es la última botella de amor
en la mesa de este año
Devuelve la embriaguez a la copa
la copa a la botella
la botella a la uva
la uva a la vid
el amor al amante
y las agujas del tiempo
al reloj de la pared
gira tu única silla
al revés de las agujas del reloj
y reordena la mesa.

Viewing all 7276 articles
Browse latest View live


<script src="https://jsc.adskeeper.com/r/s/rssing.com.1596347.js" async> </script>