Wilberth Alejandro Rejòn Huchin
(Mérida, Yucatán, México 1997). Ganador del primer lugar en el X y XI concurso estatal de poesía de los colegios de bachilleres de Yucatán, participó en el XXIII encuentro académico de jóvenes escritores realizado en la ciudad de Huatulco en el 2014 y fue ponente en el primer encuentro literario del sureste realizado en la ciudad de Mérida en el 2015, ha publicado en las revistas digitales: Cinosargo, morbìfica, bistró, literatura y poesía, hijos de marzo, portal de poesía contemporánea, revista sin fin, experimental lunch, el grito literario, mal de ojo, letrina, monolito, a buen puerto, suplemento letras en rebeldía, bitácora de vuelos, entre otras. Dirige el sitio de difusión poética “marcapiel”.
PANTEÍSMO INORGÁNICO
Los diamantes del ultramar nacen de mi dama
menstruando un tiempo que no contiene latidos,
blando como la forma atiborrada de vahos desacelerando
el fruto perpetuo de la carne en el ayuno iridiscente,
mis bronquios son un circuito de espigas
donde bebe la mujer del instante toda sombra que se yergue.
Así,
los cinéticos universos sólo vieron
barros de lamentos
en la calefacción bondadosa
donde los labios de pieles
juntaron sus ramas atisbando
un bucólico ídolo
en el agua del reposo.
LAGO VOLÁTIL
Las mujeres saben que el sueño
descalzo sobre el umbral
no es una piel de algo
sino la espora deglutiendo
todo el paisaje inamovible:
la nieve que es líquido vientre
de flor eyaculada desde la superficie.
se vierten desde las bisagras
como un diluvio que consagra toda la
amputación del cardumen,
y piensan el latir desde una sombra que arrecia las nubes,
acarrean todo hasta ese arroyo
donde sangran las espigas,
dejando el todo al aire:
ciénega retratada.
NIEBLA DE SOL
Donde la boca del alba siembra tus labios
el agua corre hasta el caudal del sueño,
se desata toda tu piel hasta
callar la noche como un alma que gime
sobre los focos de aceite
que tiñen los espejos,
disipan todas las aguas en tu color
despertando en lienzos donde
los bondadosos racimos se abran
como la arena entre los ojos,
figuras de ángel se incrustan en los tallos
hasta que tu vientre anidando los poros
dispersos en los pastos de aire donde va nuestra vida
refracta una gota de ceniza
como todas las lecturas
del barro que transporta nuestra carne.
POEMA
Un tallo se derrama
verbalizando
los oídos que brotan
desde el ventanal
donde dialoga la luz.
MARIPOSA
Desde la luz sin pliegues
la mariposa nace
un cisne de cristal.
CRISANTEMO
Cristalinos puentes brillan al final,
la linfa parpadea refracciones inconclusas,
en la nube de la luz ondea un surco,
se agita inmóvil hasta borrar
el cuadro de las sangres.
CANCIÓN DEL ÁNGEL
A susan
Soltarán sus primeras pestañas al amanecer en las ballestas de oro,
vendrán con su líquido florido a disparar el tiempo
bajo el manto de los peces que reposan el sueño,
entonces, collares intersticiales saldrán en busca de la orilla
con sus gemidos a espiral para clavar sus alas en los ojos de los niños,
dormir el prado que se incendia de algas al sepultar el charco
de los nervios.
Sin título I
La vida es un tenue coágulo que denota su luz.
Sin título II
El ángel busca su corazón en los pistilos de la niebla.
Sin título III
El ángel cortado de luz
no logra conciliar el sueño
de la niebla.