Marlon Francisco
Poeta, cantante lírico y gestor cultural guatemalteco.Ha publicado los poemarios: Piel Inédita, Espejo Espejo, Casa de Pasos Ocultos y Recintos Olvidados, aparece en antologías de poesía guatemalteca como Voces de Posguerra, Incubus y otras. Tallerista y gestor cultural para jóvenes desde la iniciativa Arte para Vivir y conductor del programa radial Ingeniería con sentimiento, sobre arte guatemalteco. Ha sido jurado de honor en el Poetry Slam Guatemala.
[1]
Enredadera
Lo cordial y correcto es servirle el café
oloroso y fuerte
como un hombre desnudo en una taza
y beberlo mientras aún esté caliente
luego voltea a la ventana
su mirada se infecta de una luz enorme
“¿Viste como la enredadera está subiendo por el muro?”
reparo finalmente en como en poco tiempo
ha pasado de unos brotes
a amenazar las fronteras
las barreras imaginarias
que separan a los mareros los balazos y la gente nefasta
de mi pequeño mundo de ópera y poesía
quizás si me conociera
dejaría de apretar sus dedos vegetales contra mi miseria
¡Apúrate amante!
El café se enfría
se me conoce por la plasticidad gélida
de mis artes amatorias
y no me entrego
a quien no sabe beber
siquiera un café
(de la colección Fetus in Fetu)
[2]
II
Para todo hay excusas acá mijo
por eso en este mundo
mentimos
somos infieles y engordamos
por eso en este mundo ser feliz
es el horizonte
el corolario
y el desagüe de nuestras vidas
yo tengo muchas excusas
de por qué no te amé
la edad la inseguridad
los celos
cada palabra que te diga
se puede disfrazar convincentemente de verdad
hay una respuesta distinta
por cada segundo de cada día
de todos los años que no estuviste conmigo
ninguna es la correcta
no hay correctas tristemente
sólo las diatribas que me repito
para no pensar en vos
para no imaginarme si serías colocho
si cantarías
si yo te amaría más que al arte
Nada en este mundo
para mí o para vos
tiene sentido
por eso tenías que irte pronto
yo me quedé para siempre con la duda
y no sé en donde acomodarme
los retazos de culpa y recuerdo
que tengo con tu nombre
(de la colección El Adiós y el Retorno)
[3]
I
Fui a verte
estabas desdibujado por la lluvia
como un cuadro de Matisse
hecho de acuarelas y bullicio
Cargabas un siglo de luces en el cuello
una muchedumbre de marsopas
resoplaban canciones de cristal
Eras la noche en fuga
la desesperada armonía de mil pasos
esquivando la jauría
de vehículos y rostros anónimos
Te reconocí con sólo olerte
con inhalar el narcótico perfume de tu piel
estabas sentado entre un sinfín de nazarenos
contando lágrimas y monedas
(seguían cabales las unas y las otras
sin pérdidas ni ganancias)
mi voz se soltó de la correa
fue al ominoso encuentro de tus manos
y se acomodó hasta el fondo
buscó incendiar con ámbar las tinieblas
hacer que por un segundo
me vieras entre el gentío
Y así nos encontramos sin tanto protocolo
Vos no me estabas esperando
ni siquiera sabías de mi existencia
Sólo te limpiabas las heridas
te sentabas a esperar que el camino
se desembarazara de sombras
se llevara entre los pasos
una mínima porción de tus tristezas
Por eso ahora
camino solamente de noche
y llevo siempre una vela extra
y una palabra dulce
por si acaso…
(De la colección Poemas de Flor de Juventud – Segundo Momentum)
[4]
Ajbe´
Camino siempre
desde antes de abrir los ojos
desde el pasado
ya venía caminando
soy viajante
Nací para gastar las suelas
Triste
con hambre a solas
sigo acumulando pasos
marchando sobre esta rueda del tiempo
no voy huyendo de nada
camino ligero
porque me urge llegar
porque sé quiénes allá me esperan
Hoy no he descansado
no he dejado de andar por el sendero
Escarbo muy adentro
porque se oyen voces
porque se ven manos que acarician
Ahí quiero llegar
tal vez ahí me siente a descansar
(De la colección Poemas Normales)
[5]
En noches como esta
te das cuenta
de toda la memoria
que se escapa entre tus manos
vuelves a lugares de infancia
te alegran travesuras
te arrepientes de no haber dicho
quisieras un día más con tus muertos
y que se allanara
un camino entre tu vida y la felicidad
Son estas noches
las que te roban el sueño
viéndote distinta a lo que imaginaste
paralizada en tus cautiverios
amordazada
con la silueta de la muerte
carcomiendo tus últimos anhelos
.