Gyorgy Marno (Budapest, HUNGRÍA - 1975)
Cursó estudios de Filosofía mientras trabajaba en la Biblioteca de Budapest. Actualmente reside en Madrid. Ha publicado varios libros en los que destacan Versos de Nadie y Una mañana descubres...
Creemos saber quienes somos
Creemos saber quiénes somos.
No corremos asustados
después de ver en el espejo
un par de ojos, nariz, labios,
orejas, cabellos…
No miramos con extrañeza
a nuestros semejantes cuando dicen
Buenos días, Buenas noches, Gracias,
De nada, Te amo…
Creemos saber quiénes somos.
Sólo nos permitimos el lujo
de la perplejidad
en la infancia o en los manicomios.
Algún día
Aun no sé cuánto significas para mí;
sobre el carácter de tu espíritu
y tus silenciosos pensamientos, poco
puedo decir; apenas si comprendo
que mi amor por ti es insuficiente,
aunque quizá te haga bien. Algún
día, en los amaneceres de invierno
cuando Hungría se hiela, tú me mirarás
a los ojos, y me sabrás perdonar.
Eramos niños
Juntábamos las manos
haciendo un cuenco
para atrapar la lluvia.
Éramos niños.
Sólo necesitábamos las manos
para saciar nuestra sed.
Deuda
Debemos a un acreedor
orgulloso de su caligrafía.
Ninguna deuda es ignorada,
ninguna falta pasada por alto.
Todo está allí,
escrito con la prolijidad
de quien no conoce otro oficio.
No habrá indulto, condonación, o piedad.
Pagaremos lo debido.
Mientras tanto jugamos, torpes,
en la columna del haber.
Traducción de Lucas Sarasibar