Mia Couto.
António Emílio Leite Couto, conocido como Mia Couto, (Beira, Mozambique, 5 de julio de 1955) es uno de los más conocidos escritores mozambiqueños actuales.
En 1972 se instaló en Maputo y empezó a estudiar Medicina al tiempo que se iniciaba en el periodismo. Abandonó los estudios para dedicarse plenamente a la escritura. Más adelante estudió Biología, profesión que ejerce en la actualidad. Ha sido director de la Agencia de Información de Mozambique, de la revista Tempo y del diario Notícias de Maputo.
Su carrera literaria se inicia en 1983, con el libro de poemas Raiz de Orvalho, al que siguió, en 1986, su primer libro de cuentos, Vozes Anoitecidas Ha publicado crónicas, relatos breves y varias novelas. Su producción literaria, ya muy extensa, goza de enorme prestigio en los países de lengua portuguesa, y está traducida a varios idiomas, entre ellos el español, catalán, sueco, francés, alemán e italiano.
En 1999 Mia Couto recibió el Premio Virgílio Ferreira, por el conjunto de su obra.
Couto nació como António Emílio Leite Couto el 5 de julio de 1955, en la ciudad de Beira, la segunda ciudad más grande de Mozambique,donde además creció y estudio. Hijo de emigrantes portugueses que se mudaron para formar un colonia portuguesa en 1950. A la edad de catorce años algunas de sus poesías fueron publicadas en un periódico local, Notícias de Beira. Tres años después, en 1972, se mudó a la capital Lurenço Marques (Hoy Maputo) y comenzó a estudiar medicina en la Universidad Lourenço Marques. Durante ese periódo la guerrilla anti-colonialista y el movimiento FRELIMO estuvieron luchando para derrocar el gobierno colonial en Mozambique.
[editar]Después de la independencia de Mozambique
En abril de 1974, después de la Revolución de los Claveles en Lisboa y el derrocamiento del régimen del Estado Novo, Mozambique pasó a ser una republica independiente. En 1974, FRELIMO le pidió a Couto que suspendiera sus estudios por un año para trabajar como periodista para Tribuna hasta septiembre de 1975 y después como director de la recién creada Agencia de Información de Mozambique (AIM). Más tarde, dirigió la revista Tempo hasta 1981. Su primer libro de poemas, Raíz de Orvalho, fue publicado en 1983; incluia textos dirigidos en contra de la dominación de la propaganda militar marxista.
Obras
Crónicas
Cronicando (1988). Traducido al español: Cronicando, Tafalla, Txalaparta, 1995 (traducción de Bego Montorio)
O País do Queixa Andar (2003)
Pensatempos (2005)
Cuentos
Vozes Anoitecidas (1986). Traducido al español: Voces anochecidas, Tafalla, Txalaparta, 2001 (traducción de Andrés Salter Iglesias).
Cada Homem é uma Raça (1990). Traducido al español: Cada hombre es una raza. Madrid, Alfaguara, 2004 (traducción de Mario Morales).
Estórias Abensonhadas (1994)
Contos do Nascer da Terra (1997)
Na Berma de Nenhuma Estrada (1999)
O Fio das Missangas (2003)
Novelas
Terra Sonâmbula (1992). Traducido al español: Tierra sonámbula. Madrid, Suma de Letras, 2002 (traducción de Eduardo Naval).
A Varanda do Frangipani (1996). Traducido al catalán: El balcó del Frangipani. Andorra la Vella, Límits Editorial, 1997 (traducción de Goretti López Heredia).
Mar Me Quer (1998)
Vinte e Zinco (1999)
O Último Voo do Flamingo (2000). Traducido al español: El último vuelo del flamenco. Madrid, Alfaguara, 2002 (traducción de Mario Merlino).
O Gato e o Escuro (2001)
Um Rio Chamado Tempo, uma Casa Chamada Terra (1ª ed. da Caminho em 2002; 3ª ed. em 2004; rodado em filme pelo português José Carlos Oliveira)
A Chuva Pasmada, com ilustrações de Danuta Wojciechowska (1ª ed. da Njira em 2004)
O Outro Pé da Sereia (1ª ed. da Caminho em 2006)
O beijo da palavrinha, com ilustrações de Malangatana (1ª ed. da Língua Geral em 2006)
Venenos de Deus, Remédios do Diabo (2008) Traducido al español: "Venenos de Dios, Remedios del diablo". México, 2010.
Antes de nascer o mundo (2009)
Morir
después de despedirme
de las palabras, una a una.
Al final,
descontada la lágrima
queda una única certeza:
no hay muerte
que baste
para dejar de vivir.
Trad. Jorge Espina
Morrer
depois de me despedir
das palavras, uma a uma.
E no final,
descontada a lágrima,
restar uma única certeza:
não há morte
que baste
para se deixar de viver.
Poemas traducidos por: Lourdes Arencibia
Números
Desiguales las cuentas:
por cada ángel, dos demonios.
Por un Sol, cuatro lunas.
Para tu boca, todas las vidas.
Dar vida a los muertos
es tarea de infinitos dioses.
Resucitar a un vivo:
un solo amor cumple el milagro.
Tristeza
Mi tristeza
no es la del trabajador sin tierra.
Mi tristeza
es la, del astrónomo ciego.
Fruta
Lo bueno del mango
no es la fruta.
Es la sombra.
La terrenal,
cotidiana
Abnegada sombra:
Al revés del sudor
Al revés de la mano
el sudor inversa cosechado,
almacenado en el dorso de la mano.
No es la temporada de frutas.
Nadie celebra la temporada de las sombras.
Así que el amor y la pasión:
una fruta, una sombra.
La dulce y cruel mordida
de la fruta en tu boca,
en lugar de entrar en ti
quiero ser tú.
Lo que me espanta,
no es obra del tiempo
sino el viaje del sol en la savia del árbol
El arte delmango
y el vestido de sombra
envolviendo su vientre solar
Para el hombre
vale la pulpa.
Para la tierra
sólo la simiente cuenta
El barrio de mi infancia
No son las criaturas quienes mueren
Es al revés
las cosas sencillamente mueren.
Las criaturas no mueren
porque a sí mismas se hacen.
Y aquel que nace de sí mismo
se condena a ser eterno.
Sale un polvo de las tumbas
que sofoca mi pasado
cada vez que visito mi antiguo barrio.
La casa murió
en el lugar donde nací:
mi infancia
ya no tiene lugar para dormir.
Pero sucede que,
desde cualquier patio,
llega a mí la risa salvaje
de los niños jugando.
Se ríen y explican
las mismas locuras
que ya fueron soberanas
de castillos y quimeras.
Una vez más me tocó la pared fría
y siento en mí el pulso
de quien vive para siempre.
La muerte
es el abrazo imposible de agua.
Destino
Me estoy acostumbrando a la
poca ternura
en la medida en que me pospongo
siervo de daños y engaños.
Voy perdiendo morada
En la lentitud repentina
De un destino
Que me va quedando escaso.
Conozco mi muerte
Su lugar esquivo
Su acontecer disperso
Ahora,
¿qué más podría vencerme?
Para ti
Para ti
deshojé la lluvia
para ti desprendí el perfume de la tierra
toqué en nada
y para ti fui todo
Para ti grité todas las palabras
y todas me faltaron
en el minuto en que grabé
el sabor del siempre
Para ti di mi voz
a mis manos
abrí las yemas del tiempo
asalté al mundo
y pensé que todo estaba en nosotros
en ese dulce engaño
de ser dueños de todo
sin que tengamos nada
simplemente porque era de noche
y no dormíamos
descendía yo a tu pecho
para buscarme
y antes de que la oscuridad
nos ciñese la cintura
se nos quedaban los ojos
viviendo de uno solo
amando de una sola vida
Identidad
Necesito ser otro
para ser yo mismo
Soy grano de roca
Soy el viento que la desgasta
Soy polen sin insecto
Soy arena que soporta
el sexo de los árboles
Existo donde me desconozco
a la espera de mi pasado
anhelando la esperanza del futuro.
En el mundo que combato muero
en el mundo por el que lucho, nazco.
Horario del fin
Nada se muere
cuando llega la ocasión
Es sólo un bache
en la ruta por donde ya no vamos.
Todo se muere
cuando no es el justo momento
y nunca es
ese momento.
Fui sabiendo de mí
Fui sabiendo de mí
Por aquello que perdía
pedazos que venían de mi
con el misterio de ser pocos
Y de valer sólo si los perdía
Me estacioné
En umbrales
más acá del paso
Que jamás crucé
Ví
El arbol muerto
Y supe que mentía
POEMA DA DESPEDIDA
Não saberei nunca
dizer adeus
Afinal,
só os mortos sabem morrer
Resta ainda tudo,
só nós não podemos ser
Talvez o amor,
neste tempo,
seja ainda cedo
Não é este sossego
que eu queria,
este exílio de tudo,
esta solidão de todos
Agora
não resta de mim
o que seja meu
e quando tento
o magro invento de um sonho
todo o inferno me vem à boca
Nenhuma palavra
alcança o mundo, eu sei
Ainda assim,
escrevo.
SER,PARECER
Entre o desejo de ser
e o receio de parecer
o tormento da hora cindida
Na desordem do sangue
a aventura de sermos nós
restitui-nos ao ser
que fazemos de conta que somos.
PARA TI
Foi para ti
que desfolhei a chuva
para ti soltei o perfume da terra
toquei no nada
e para ti foi tudo
Para ti criei todas as palavras
e todas me faltaram
no minuto em que falhei
o sabor do sempre
Para ti dei voz
às minhas mãos
abri os gomos do tempo
assaltei o mundo
e pensei que tudo estava em nós
nesse doce engano
de tudo sermos donos
sem nada termos
simplesmente porque era de noite
e não dormíamos
eu descia em teu peito
para me procurar
e antes que a escuridão
nos cingisse a cintura
ficávamos nos olhos
vivendo de um só olhar
amando de uma só vida.
A Demora
O amor nos condena:
demoras
mesmo quando chegas antes.
Porque não é no tempo que eu te espero.
Espero-te antes de haver vida
e és tu quem faz nascer os dias.
Quando chegas
já não sou senão saudade
e as flores
tombam-me dos braços
para dar cor ao chão em que te ergues.
Perdido o lugar
em que te aguardo,
só me resta água no lábio
para aplacar a tua sede.
Envelhecida a palavra,
tomo a lua por minha boca
e a noite, já sem voz
se vai despindo em ti.
O teu vestido tomba
e é uma nuvem.
O teu corpo se deita no meu,
um rio se vai aguando até ser mar.
in " idades cidades divindades"
O Amor, Meu Amor
Nosso amor é impuro
como impura é a luz e a água
e tudo quanto nasce
e vive além do tempo.
Minhas pernas são água,
as tuas são luz
e dão a volta ao universo
quando se enlaçam
até se tornarem deserto e escuro.
E eu sofro de te abraçar
depois de te abraçar para não sofrer.
E toco-te
para deixares de ter corpo
e o meu corpo nasce
quando se extingue no teu.
E respiro em ti
para me sufocar
e espreito em tua claridade
para me cegar,
meu Sol vertido em Lua,
minha noite alvorecida.
Tu me bebes
e eu me converto na tua sede.
Meus lábios mordem,
meus dentes beijam,
minha pele te veste
e ficas ainda mais despida.
Pudesse eu ser tu
E em tua saudade ser a minha própria espera.
Mas eu deito-me em teu leito
Quando apenas queria dormir em ti.
E sonho-te
Quando ansiava ser um sonho teu.
E levito, voo de semente,
para em mim mesmo te plantar
menos que flor: simples perfume,
lembrança de pétala sem chão onde tombar.
Teus olhos inundando os meus
e a minha vida, já sem leito,
vai galgando margens
até tudo ser mar.
Esse mar que só há depois do mar.
in "idades cidades divindades"
Fui Sabendo de Mim
Fui sabendo de mim
por aquilo que perdia
pedaços que saíram de mim
com o mistério de serem poucos
e valerem só quando os perdia
fui ficando
por umbrais
aquém do passo
que nunca ousei
eu vi
a árvore morta
e soube que mentia
in "Raiz de Orvalho e Outros Poemas"